Hassan es el portavoz de la comunidad musulmana de Galicia
30 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La comunidad musulmana de Galicia se ha volcado con la familia de las víctimas desde el momento en que se produjo la tragedia. Lamentan que el propietario de la pirotecnia tuviese almacenes clandestinos en zonas urbanas y que no colaborase con las fuerzas de seguridad para localizarlas y esperan que nunca se vuelva a repetir un suceso de estas características. «Esperemos que no vuelva a ocurrir, que haya autoridad que nos proteja a todos porque nadie está protegido», sostiene Hassan, el portavoz de la comunidad de musulmanes de Galicia.
La peor parte de esta catástrofe se la han llevado los dos hijos del matrimonio, recalcan desde el colectivo. «Los niños están fatal, han perdido a sus padres, su hogar, todo. Estuve con ellos, el pequeño de 6 años no lo sabe, el mayor sí porque su madre le habló. Después de la explosión su madre seguía viva. Si hubiera una actuación más rápida podría haberse salvado», confiesa el portavoz sin ánimo de culpar a nadie. «Fue un gran shock, después de la explosión la gente no pudo reaccionar», asume Hassan.
Para evitar episodios similares, la comunidad musulmana hace un llamamiento al sentido común. «Hay que tener un poco más de responsabilidad en ese tema para que no vuelva a suceder a nadie», reclaman y al mismo tiempo advierten que «en esta zona hay bastante gente que maneja explosivos y no están controlados como se debe».
Tras visitar la zona cero, a Hassan le «extraña que no hubiese más víctimas, podía haber sido catastrófico. Por desgracia esos niños han quedado huérfanos y está todo destrozado pero podría haber sido mucho peor». Aunque «lo que me da más rabia es que este señor no ha colaborado con la autoridad. Tiene más explosivos escondidos en medio de las viviendas y debería tener un poco de conciencia y avisar de dónde tiene todos sus almacenes porque ya sabe el daño que ha hecho», sostiene muy molesto Hassan, quien no comprende cómo «no colabora» después de lo ocurrido.