77.000 mayores de Vigo no tienen acceso a los geriatras del Sergas

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Povisa no ofrece esta especialidad y el Chuvi todavía divide a los pacientes entre las áreas del Xeral y el Meixoeiro dos años y medio después de abrir el Cunqueiro

16 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay una larga lista de estudios que han dejado claro que uno de los elementos que más influyen en los servicios sanitarios a los que tiene acceso la ciudadanía es el código postal. Esto es una realidad incluso en pequeñas áreas de población. En la de Vigo, alguien que viva en Rosalía de Castro tiene una matrona a dos minutos de su casa, mientras que alguien empadronado en Arbo tiene que viajar a otro municipio para recibir ese mismo servicio. Pero esto no suele pasar en el hospital: cualquiera tiene cardiólogos, internistas o cirujanos torácicos, y si un ciudadano está adscrito a un hospital que no tiene una especialidad determinada, el Servizo Galego de Saúde lo deriva a otro. Excepto en geriatría.

Porque la geriatría es una especialidad para afortunados. Incluso dentro de la ciudad de Vigo. Hay mayores que tienen acceso a una consulta con el geriatra y otros que no. Las personas adscritas al Hospital Povisa no tienen geriatra a su disposición, ya que el Sergas no incluyó este servicio dentro del concierto.

Pero incluso dentro del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo no todos los pacientes tienen derecho a geriatra. Es el único servicio que todavía divide a la población entre el sector del Xeral y el del Meixoeiro, algo que el Sergas finiquitó, teóricamente, hace dos años y medio, al abrir el Álvaro Cunqueiro.

«En hospitalización abarcamos toda el área de Vigo, pero en la consulta externa, solo la antigua del Meixoeiro», explica el jefe de servicio, José Manuel Vega. «Estamos haciendo planes, pero todavía no hemos podido, porque la plantilla que tenemos en el servicio no ha variado», abunda. No es que los geriatras no quieran, es más bien que no pueden. En todo caso, los médicos de cabecera delos centros de salud antiguamente adscritos al Xeral no pueden derivar a sus pacientes mayores a la consulta de geriatría, que sigue estando en el Meixoeiro.

La Voz ha hecho un cálculo tomando como base los datos oficiales de población del Sergas y teniendo en cuenta la antigua frontera que dividía los centros de salud de Vigo entre el Xeral y el Meixoeiro. El resultado de esa estimación es que 77.000 personas de más de 65 años no pueden ir a una consulta con el geriatra 42.000 sí. En otras palabras, dos de cada tres ancianos no pueden ir al geriatra.

El jefe del servicio explica -sin entrar en cifras- que la función de su especialidad es hacer «una valoración geriátrica integral tratando las enfermedades una por una pero también en su conjunto». No se trata solo de curar o mejorar la supervivencia, sino de aumentar la calidad de vida.

A pesar del envejecimiento, en Galicia, solo hay geriatras en los hospitales de Lugo y Vigo. Claro que en Vigo es parcial. En las 38 camas de geriatría del Meixoeiro, sí ingresan pacientes de todo el ámbito del Chuvi -nuevamente, quedan fuera los 35.000 para los que su hospital es Povisa-. El enfoque de las consultas externas que ofrecen los geriatras consiste en, precisamente, tratar de adelantarse a las posibles descompensaciones de los pacientes para procurar que no ingresen en el hospital. Pero solo pueden hacerlo en un tercio de la población.

El enfoque integral de los geriatras sobre el paciente es fundamental, porque las personas mayores que ingresan no suelen padecer solo una enfermedad. Los resultados están a la vista en la unidad de ortogeriatría: uno de los cinco especialistas trabaja dentro del servicio de traumatología y valora a todas las personas mayores que son operadas de cadera. Con eso se han reducido la mortalidad y las enfermedades asociadas.