El artista se iba en 1996
30 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.a muerte sorprendió al pintor vigués Xosé Lodeiro casi con los pinceles en la mano. El artista seguía acudiendo cada día a su estudio de la calle del Marqués de Valladares, pese al cáncer que venía sufriendo desde un años antes, y que la noche del 30 de septiembre de 1996 acabó con su vida. Lodeiro, que se consideraba un obrero de la pintura, fue uno de los pioneros de las vanguardias en Galicia, y su individualidad creadora está catalogada como una de las más ricas aportaciones a la historia de nuestra cultura.
Dos días más tarde, Xosé Lodeiro fue despedido con la melodía de las gaitas y las notas del himno gallego coreadas por los presentes en el emotivo acto. El artista vigués fue homenajeado por numerosos amigos que acudieron a darle el último adiós.
Junto a su cuerpo, un cuadro del autor, de brillantes colores en tonos naranja y de grandes dimensiones, lo acompañaba en su despedida. Un pequeño parque en García Barbón recuerda su nombre.