La empresa Norbike denuncia presiones del Concello para que retire el soporte para bicis que han instalado ante su tienda en Montero Ríos
04 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.La empresa Norbike, con sede en Baiona y regentada por tres vigueses, abrió el año pasado una segunda tienda en el paseo de Montero Ríos. Allí, delante de su fachada, instalaron en marzo un soporte en el que ofrecen el servicio de alquiler de bicis eléctricas, que actualmente es el único que existe en Vigo.
Según cuenta uno de ellos, David Rocha, hace tres meses que pidieron licencia al Concello para colocarlas, «pero no contestan, aunque tampoco nos han dicho que no. Y no lo hacen porque una negativa hay que argumentarla y no tienen argumentos», opina.
«Desde entonces tenemos una pequeña guerra abierta. De inmediato vino un representante de la concejalía de Movilidad a decirme que el espacio que tengo frente a mi fachada es para poner mesas, sillas y sombrillas de otros negocios. ¡Delante del mío!, pero nosotros no somos un bar de copas ni un restaurante, lo normal es que pongamos bicicletas. Es una cosa increíble, no creo que pase en ningún otro sitio», exclama.
Añade que poco después recibieron la visita de la Policía Local, «tras la denuncia interpuesta por una cafetería y otro día una mediadora para que reculásemos y evitásemos que la denuncia siguiera su curso. Sentimos la presión por parte del Ayuntamiento, pero no vamos a retirar el soporte sin una orden», afirma.
Rocha explica que la iniciativa obedece a un plan más ambicioso que combina lo público y lo privado. Lo que plantearon al Concello es colocar un amplio aparcabicicletas fijo en el cual ellos colocarían sus bicis para alquilar, pero los ciudadanos también lo podrían utilizar para dejar allí las suyas. «Si quieres tomarte algo la dejas allí, gratis. Es un servicio que de hecho debería ofrecer los gestores municipales, pero esa es otra batalla. En la nuestra no somos capaces de avanzar, porque no nos dejan. El lunes tuvimos una reunión con el edil del BNG Santiago Domínguez para plantearle la situación y el día 8 tenemos otra con el responsable de movilidad».
El comerciante opina que es «un enfrentamiento que no tendría por qué existir. Vigo no puede ser solo coches, párkings y bares, también habrá que fomentar otro tipo de negocios y de ocio, ¿no?. A los vigueses les gusta ir en bici si se les da facilidades, y para los turistas también es otro atractivo».
Pero David Rocha es consciente de que tratar de abrir un hueco para este transporte es complicado en la ciudad. Y eso a pesar de que aunque el avance es tímido, cada día se ven más vigueses que utilizan la bici eléctrica para sus desplazamientos.
Norbike llevó el servicio de alquiler con el Concello en el 2011. Tuvieron la concesión durante cuatro meses en los que registraron más de 1.500 usuarios. No se la renovaron ni se la dieron a otros. Desapareció. «No quieren poner el servicio público de bicicletas, pero lo vamos a hacer nosotros», asegura el responsable, cuya empresa gestiona actualmente este apartado urbano en Salamanca, Castellón, Portosín y Porto do Son.