El PP reta a Caballero dando la palabra en el pleno a Teresa Cendón

Juan Manuel Fuentes Galán
Juanma Fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO

Los socialistas dijeron que se marcharían cuando interviniera esta edila si no rectificaba sus acusaciones de enchufismo. Y no lo ha hecho

06 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Fuera una bravuconada o una amenaza en toda regla, se sabrá en breve. El pasado 25 de noviembre, el gobierno municipal advirtió al PP y a su concejala Teresa Cendón, que no iban a intervenir cuando ella fuera portavoz y que se marcharían del salón de sesiones. Motivo: las acusaciones que profirió ese día en la sesión plenaria, en las que acusó al alcalde de machista y de «poner o quitar contratos cuando no tiene un amiguiño para contratar Sereos».

Estas palabras incendiaron la sesión hasta el punto que unas horas después el teniente de alcalde, el socialista Carlos Font, envió un comunicado a los medios de comunicación exigiéndole que rectificara. De no hacerlo, pondrían en marcha el boicot mencionado. Y como la rectificación no se ha producido, el gobierno vigués solo tiene dos opciones: olvidarse de la amenaza, lo que los dejaría en mal lugar, o bien cumplirla, con todo lo que implica al tratarse de un gobierno que trata de callar la boca al grupo mayoritario de la oposición.

Desde el día del conflicto ha transcurrido casi mes y medio, y tanto socialistas como populares guardan un escrupuloso silencio. Sin embargo, con la convocatoria del primer pleno ordinario desde entonces, que tendrá lugar el próximo miércoles, se ha constatado que el PP no está dispuesto a retroceder.

En este sentido, una de las tres mociones a las que tiene derecho, la que plantea un plan de defensa contra la plaga de las palmeras, va a ser defendida por Cendón. Esta decisión anticipa un enfrentamiento entre ambos grupos cuyo desenlace es imprevisible.

Si finalmente se marchan sería posiblemente la primera vez que lo hace un gobierno municipal en la historia democrática. En ocasiones se han producido abandonos por parte de concejales de la oposición, pero formar parte de un gobierno implica una responsabilidad difícil de conciliar con presiones de este tipo.

Enchufismo

El pleno de noviembre tuvo lugar días después de la denuncia del exalcalde del PSOE, Carlos Príncipe, contra su correligionario y actual regidor, Abel Caballero. En concreto, elaboró una larga lista de dirigentes y afiliados socialistas contratados ahora mismo en el Concello y antes en la Autoridad Portuaria cuando la presidía Caballero, destacando el enchufismo y amiguismo que se produce con el actual alcalde.

Este hecho fue aprovechado por el PP, que envió varios mensajes a los socialistas durante la sesión. Primero fue la concejala Marián García Míguez, quien espetó al gobierno local que «ustedes piden el carné del PSOE para empezar a trabajar». Un rato después le siguió Teresa Cendón, que calificó al ejecutivo socialista de «inmoral», asegurando que sus «propuestas éticas no hacen pie, por lo que deberían hacer un cursillo de natación».

Estas palabras fueron calificadas por el socialista Font como «gravísimas acusacións», por lo que anunció que «o grupo socialista decide non intervir e abandoar os plenos cada vez que interveña a señora Cendón ata que retire públicamente os insultos».