El hospital tiene los quirófanos a medio gas por falta de fondos
29 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Los quirófanos de Povisa están a medio gas. El hospital privado que atiende a 141.000 ciudadanos del área de Vigo tiene capacidad para hacer mucho más de lo que hace. El resultado es que hoy hay más del doble de pacientes están pendientes de una operación que a mediados del 2009: 5.468 personas esperan ahora, frente a las 2.794 de entonces. Las cirugías en Povisa tardan más que en cualquier otro hospital gallego (209 días). El Valedor do Pobo ha llamado la atención al Sergas por consentirlo. Y hasta las encuestas de satisfacción internas del hospital del grupo Nosa Terra revelan que esa es la principal tacha que le ponen los pacientes.
Pero los quirófanos están a medio gas. ¿Por qué? Porque el hospital considera que ya hace todo lo que debe hacer según lo que el Sergas le paga, unos 75 millones al año. Así que su enorme lista de espera se convierte en un problema del Sergas.
Pero el organismo sanitario espera que esto cambie con el nuevo concierto a diez años, que ya está acordado y que se firmará dentro de tres meses, cuando se haya completado la tramitación administrativa. En su tirón de orejas al Sergas por la lista de espera de Povisa, el Valedor do Pobo decía que los conciertos con hospitales privados «deberían estar supeditados a un estricto cumplimiento de los plazos que legalmente están establecidos». El nuevo concierto no recoge objetivos, pero sí obliga a firmar un acuerdo de gestión anual. Ese acuerdo, como revelaba ayer en La Voz la gerente del Sergas, Nieves Domínguez, contemplan penalizaciones de hasta un 3 % en las tarifas. Y fijan objetivos.
El tiempo máximo que se puede demorar una operación en Galicia, según la nueva ley de garantías, es de 60 días. Las consultas y pruebas no pueden retrasarse más de 45. El Sergas ya tiene un borrador con los objetivos concretos que marcará a Povisa y recogerá al menos esos. Actualmente, 3.943 personas llevan más de tres meses en la lista de espera de Povisa, el 72 % de los que esperan una operación.
Es algo que ya se ensayó, y con cierto éxito. El Plan Especial para la Reducción de las Listas de Espera (Perle), que se finiquitó en el 2009, logró que la Xunta tuviese el poder de fijar objetivos a Povisa. La lista de espera cayó como nunca. Pero era a cambio de dinero extra.
Ahora, el Sergas pagará a Povisa 540 euros por paciente y año hasta un máximo de 139.000 -el tope son 75,06 millones, una cifra similar a la actual-, que se adscribirán de manera voluntaria: los pacientes actuales del hospital podrán irse al Chuvi; pero solo esos podrán elegir. Al pagar por paciente y no por actividad, y al fijar objetivos concretos, el Sergas confía en que el hospital privado contenga su lista de espera y que sus quirófanos dejen de estar a medio gas.
Es más, si sigue derivando pacientes de Povisa a Pontevedra será el hospital privado el que se hará cargo del coste. Aunque hay un matiz, que admite la gerente del Sergas. Povisa solo pagará cuando sus pacientes acudan a otro hospital para recibir un servicio que Povisa ya ofrece, como una operación de rodilla. Pero si el traslado es para un servicio que Povisa no tiene -un parto, un trasplante, etc.- será el Sergas quien lo costee.