Cuentos chinos

VIGO

22 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El cuento chino ha derivado en coreano y japonés. Porque va a terminar 2013 y no hay ningún barco en las gradas de Barreras. Era falso todo lo que anunció el presidente Feijoo en octubre del 2012, cuando se presentaba a la reelección. Nunca existieron unos contratos con Pemex. Tras los comicios, se supo que la firma de estos presuntos convenios (nadie los ha visto), se hizo con PMI, una filial de la petrolera mexicana. Es de sospechar que se trataba de Zumos PMI.

Porque la magnitud del cachondeo es enorme. «Los dos floteles se estarán construyendo antes de final de año», dijo Alberto Núñez Feijoo en la última campaña electoral. Lo que no dijo es de qué año. Van a pasar 2012 y 2013 sin noticias del tema.

Ahora, se demora una y otra vez el concurso internacional. La última fecha es el 30 de diciembre. Mientras el ministro de Industria anunciaba esta semana que solo se adjudicaría un flotel, no dos. Los desmentidos posteriores no hacen sino aumentar el bochorno.

Para colmo, esta semana hemos conocido que Repsol y Gas Natural acaban de contratar cuatro buques gaseros en Corea y Japón. Se construirán en los astilleros Hyundai e Imabari, ignorando a Ferrol y Cádiz.

Así se comporta la misma petrolera que hace un año pedía la solidaridad de los españoles por sus problemas con YPF en Argentina. Pero nada es de extrañar. Basta ver los accionistas de Repsol y de Gas Natural. Entre los que figura Pemex, por cierto. Y tirar del hilo y ver a los accionistas de los accionistas. El gráfico final dibuja una telaraña de poder enorme. Ese es el conglomerado que manda y al que el ciudadano no controla. Tampoco los políticos, atados por sus intereses y que ya ni saben si sus cuentos son chinos, coreanos o japoneses.

eduardorolland@hotmail.com