Baiona nada en playas sin humo

néstor villamor BAIONA / LA VOZ

VIGO

Con la ampliación de la norma a Os Frades ya son tres los arenales del municipio en los que está prohibido fumar

21 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Buen día en Baiona. El tiempo y la temperatura hacen de la playa una visita obligada. En el arenal de A Ribeira, las bañistas Patricia Álvarez y Andrea Porto, tabaco en mano, salen educadamente de la playa. El motivo es la prohibición de fumar, tanto en A Ribeira como en Barbeira y, por primera vez este año, también en Os Frades. «Yo fumo, pero me parece bien», dice Andrea. Su amiga no comparte su opinión: «A mí me parece mal porque es un sitio público, lo único malo son las colillas, que se tiran en la arena y luego la gente las pisa».

Consideraciones personales aparte, los ciudadanos y veraneantes de Baiona no han tenido problema para adaptarse a la normativa municipal que prohíbe fumar en tres playas. Así lo corroboran los socorristas y voluntarios: «La mayoría lo respeta sin problemas», explica Naroa Saavedra, socorrista de la playa de A Ribeira. Claro que «siempre hay alguien que se pone borde», añade Rubén Lores, voluntario de dicho arenal, quien también explica que el verano pasado repartían unos folletos a los fumadores. Este año, sin embrago, el Ayuntamiento no se los ha facilitado.

Ante los posibles casos de negativa a aceptar la norma, los socorristas no pueden amenazar con multas ni sanciones de ningún tipo ya que la medida no penaliza al fumador. Y eso que, tal como explica Lores, «el verano pasado se iba a hacer de forma experimental y este año se iba a empezar a multar». Sin embargo, solo se le solicita al fumador que salga fuera de la playa hasta que termine su cigarro.

«No es como la gente que se viene con perro», apunta Hernán Alonso, también socorrista, en este caso de Os Frades, «ahí sí que les tenemos que exigir que se lo lleve y, si se niega, llamamos a la policía».

En las inmediaciones de Os Frades, David Miniño y su amigo Juanma Treinta ya se encienden su cigarro. «Nosotros nos traemos ceniceros para no dejar todo tirado», comenta el primero. A pesar de ser zonas sin humos, en A Ribeira y Os Frades los bañistas echan de menos sendos ceniceros, porque, como dice Juanma, «hay gente que tira todo al suelo y eso no puede ser».

Además proteger a los pequeños del humo del tabaco, fue precisamente la limpieza de las playas lo que ha llevado al gobierno local a tomar medidas.

Este verano, la situación es diferente, tal como apunta Ángel Rodal Almuiña, concejal de Vías y Obras y Medio Ambiente: «Hemos limpiado todos los arenales al principio de verano y casi no había colillas». También explica que la elección de estos arenales se debe a que «son playas semiurbanas y con muchos niños». Los buenos resultados del verano anterior y la aceptación de los usuarios han motivado que este año también sea Os Frades una zona sin humos.

Por ahora, no se plantean ampliar esta medida a otras playas ni penalizar a los fumadores, ya que las autoridades entienden que «hoy en día parece que todo se sanciona», según Rodal Almuña, y no existe un afán recaudatorio: «Si la gente lo acepta con sentido común, no hay ningún problema».