A completar un enero mágico

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

VIGO

29 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La angosta cuesta de enero se ha convertido en la mejor rampa de lanzamiento para el Celta y los vigueses quieren completar un mes mágico con un triunfo en el Miniestadi que dispare todavía más sus expectativas. Los célticos cierran el mes ante una de sus dos bestias negras de toda la primera vuelta, un Barcelona B que ha recuperado a Thiago Alcántara y que quiere volver a situarse en la zona de play off.

El duelo del Miniestadi se presenta como la gran reválida para el mejor visitante de la Liga. Después de tres victorias consecutivas a domicilio y una serie de nueve partidos sin perder, el Celta se enfrenta a una de las salidas más complicadas del curso. Por el nivel del rival, con jugadores llamados al relevo del mejor Barça de todos los tiempos, pero sobre todo por su manera de jugar, porque el filial azulgrana es uno de los pocos en la categoría que puede negarle a los celestes el contacto con el esférico. Herrera lo sabe y meditó un giro para la visita a Barcelona, pero al final ha decidido mantener la apuesta y plantear al grupo de Luis Enrique un partido entre iguales, aunque con salvedades. La primera, tener paciencia y saber defender las posesiones largas del rival. La segunda, aprovechar las salidas a la contra para desnudar la zaga azulgrana.

Para conseguir el primer propósito recupera a Roberto Lago para el lateral izquierdo, lo que posibilita contar con la zaga de gala. Para el segundo, mantiene una duda (solo en público) en el centro del campo. Álex López, su hijo futbolístico en Vigo, regresa después de cumplir la sanción y hasta el momento el ferrolano nunca ha experimentado la sensación del banquillo, pero siempre hay una primera vez, y el Miniestadi pudiera ser el sitio elegido. Michu, con juego y con tres goles en dos salidas, se ha ganado el derecho a la continuidad. Nadie discute la necesidad de ver a Bustos y López Garai sobre el campo en un partido con mucho trabajo.

El duelo será especial para dos futbolistas celestes. Trashorras vuelve a la que fue su casa en el período de formación y De Lucas también recordará sus días contados en el eterno rival, porque antes de ser perico por convicción y adoración, probó en la base del Barça.

El Celta se encontrará en el rival, y solo a priori, dos bajas significativas, porque Guardiola se ha llevado a Alicante a Nolito, el goleador que puso en jaque la defensa celeste en Balaídos aunque sin acertar de cara al marco contrario, lo que hizo el otro ausente, el central Fontás, otro de los destacados en una ida que los vigueses no quieren tomar de referencia porque detestan el ánimo de revancha. Lo único importante es comenzar la segunda vuelta del mejor modo para continuar encamados una semana más en la zona de ascenso directo. Sería la mejor manera de dar carpetazo a un Tourmalet que en vez de amenazar la ilusión celeste está a punto de dispararla.