El cardenal alemán Paul Augustin Mayer, que hasta ahora era el purpurado más anciano del colegio cardenalicio de la Iglesia católica, falleció ayer en Roma a menos de un mes de cumplir los 99 años, según confirmaron fuentes vaticanas. Mayer (Altötting, 1911), perteneciente a la orden de San Benito y que iba a cumplir 99 años el 23 de mayo, fue prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, así como presidente de la Comisión Pontificia Ecclesia Dei. El propio papa Benedicto XVI remitió ayer un telegrama al abad primado de los Benedictinos Confederados, Dom Nokter Wolf, texto que fue divulgado por la Santa Sede. «La noticia de la pía marcha del venerado cardenal Paul Augustin Mayer suscita en mi ánimo un afectuoso lamento y un deseo de expresar sentimientos de vivo pésame a usted y a toda la familia benedictina, así como a los parientes del querido purpurado», afirma el Pontífice en el telegrama. Mayer «deja el recuerdo indeleble de una laboriosa existencia, llevada a cabo con apacibilidad y rectitud, en sintonía con su propia vocación de monje y de pastor lleno de fervor por el Evangelio y siempre fiel a la Iglesia», añade. El lunes tendrá lugar el funeral por el purpurado en la basílica de San Pedro, con una misa oficiada por el cardenal Angelo Sodano, decano del Colegio Cardenalicio. Al finalizar la misa, Benedicto XVI presidirá el rito final de la celebración y tomará la palabra. El más joven, de 1952 Tras el fallecimiento de Mayer, el más anciano de los cardenales es ahora el italiano Ersilio Tonini, que tiene 95 años. El más joven es el húngaro Peter Erdö, nacido el 25 de junio de 1952. El colegio de los cardenales cuenta en la actualidad con 180 miembros, según recoge la agencia AFP.