El Rubín Kazán se proclamó ayer campeón de la liga rusa a falta de una jornada para el final del campeonato nacional al empatar en su feudo ante el Zenit San Petersburgo (0-0).
Los tártaros, que suman 60 puntos por 55 del segundo clasificado, el Spartak Moscú de Karpin, reeditaron así el título de liga logrado por primera vez en su historia la temporada pasada.
Para alzarse con el título, el Rubín debía sumar dos puntos en las dos últimas jornadas, pero no lo necesitó, ya que el Spartak cayó en el estadio olímpico Luzhnikí ante el CSKA Moscú (2-3).
Esta es la primera vez desde la caída de la URSS que un equipo no moscovita gana el título de liga en dos ocasiones de manera consecutiva. Antes, solo el Alania de Osetia del Norte (1995) y el Zenit (2007) ganaran una vez.