Dos «crooners» number one

La Voz

VIGO

07 may 2009 . Actualizado a las 11:53 h.

Germán Fandiño y Alberto Cunha son dos artistas de sobra conocidos por el público vigués. Ambos tienen en común una enorme capacidad para transformarse sobre el escenario, y también coinciden en su ausencia de sentido del ridículo y en sus eclécticos gustos musicales.

Aunque cada uno sigue su propia carrera, el destino les ha llevado a unirse temporalmente para otro proyecto insólito: Las dos gargantas con más feeling del panorama galáctico musical se unen para homenajear a los grandes del siglo pasado: el Rat Pack de Sinatra y Dean Martin, Elvis Presley, Nino Bravo, los grandes de la música italiana, el blues, el bolero? y lo que ellos decidan.

Por supuesto, ofrecerán una versión muy personal de aquellos a los que admiran. Definir a esta pareja es imposible. Sus trayectorias hablan por ellos. Germán ha militado en bandas como Unión Penosa, en tríos como Los Tres Sudamaricones, y en dúos como el que formó con Eladio Santos además de aventuras con Diego Pacheco y otros más. Alberto Cunha pisa los escenarios desde la cuna. A los seis años ya había grabado su primera maqueta. Tiene querencia por la música melódica y lleva una doble vida como humorista e imitador.

Lo que pueda ocurrir con ellos dos juntos, habrá que verlo. En principio, la cosa promete: Son casi dos horas de espectáculo, donde transforman las canciones y se hacen propietarios de ellas. El beneplácito de los mitos está confirmado: Frank, Dean, Elvis, y Nino resucitarían para acogerlos como hijos putativos artísticos.

Alberto Cunha se muta en Frank Sinatra y hace que la clase y su gran voz envuelva de terciopelo los tímpanos de los presentes. Tony Lomba exhibe el jacuzzi etílico de Dean Martin, vomitando melodías irrepetibles. Los tótems gallegos de la música ligera tienen mucha munición en sus recámaras, y están dispuestos a acribillar a los que quieran disfrutar de un show que no les dejará indiferentes. Este espectáculo es atemporal, para todas las edades y para los que tengan ganas de volar en el tiempo. Ahí queda eso. Están avisados.