El centro también fue el primero de Galicia en realizar una punción pulmonar prenatal a un bebé que nació sano
19 ene 2009 . Actualizado a las 11:04 h.El líquido amniótico es un fluido que rodea el feto, le protege y cumple un papel fundamental en su desarrollo normal. Cuando por distintos motivos la cantidad de dicho líquido es mínima o prácticamente nula los problemas para el bebé están garantizados, bien en forma de defectos congénitos, nacimiento prematuro, aborto espontáneo o muerte.
El departamento de Ginecología del Hospital Xeral, que dirige el doctor Carlos López Ramón y Cajal, emplea desde hace algún tiempo una técnica pionera que se está revelando como un método eficaz para salvar dicha complicación con buenos resultados. Consiste en introducir a través del útero un sucedáneo del líquido amniótico, denominado solución Ringer. La amnioinfusión intrauterina, que es como se llama la operación, se practica entre el cuarto y el quinto mes de embarazo y requiere el ingreso de la paciente.
La experiencia, según explica el propio doctor López Ramón y Cajal, se está traduciendo en resultados muy positivos. Los primeros de esta apuesta, que sitúa al Xeral en una posición de avanzadilla en este tipo de tratamientos, están a punto de ver la luz en publicaciones especializadas. Unas cuarenta mujeres se han sometido hasta el momento a dicha técnica en el hospital vigués.
No es la primera vez que el departamento de Ginecología del centro se anticipa y marca el camino en materia de diagnóstico prenatal. Ocurrió, por ejemplo en 1989 cuando, según recuerda el doctor López Ramón y Cajal, en Galicia no se hacía prácticamente nada en medicina maternofetal. En aquella ocasión una punción pulmonar a través del útero no sólo posibilitó la vida del feto, sino que se tradujo en el primer caso en España de recién nacido sano tras la aplicación de dicha técnica.
Con todo, el doctor López afirma que tal vez el caso más espectacular al que ha asistido en sus 22 años como especialista, ha sido el suministro de medicación a un feto con problemas cardíacos a través del cordón umbilical, tratamiento en el que también fue pionero en 1991.
La grandes incógnitas en obstetricia a juicio del doctor López siguen siendo por qué se pone una mujer de parto en un preciso momento y los casos de hipertensión asociada a la gestación. «El día que solucionemos ambas incógnitas podremos tratar el parto prematuro y prevenirlo, amén de reducir la ya de por sí baja tasa de mortalidad que existe», concluye.