La generosidad artística, a subasta

La Voz

VIGO

XOÁN CARLOS

La Mirilla

04 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Es el número exacto de pintores, escultures y fotógrafos que han dicho sí a la propuesta del centro guardés de discapacitados psíquicos San Xerome Emiliani. Sus máximos responsables, Feliciano Valcárcel y José Carlos González, decidieron levantar un día el teléfono con la esperanza de que los interlocutores les entendieran. Y claro que lo hicieron. Les explicaban el trabajo que vienen desarrollando desde hace décadas. Les contaban también que para atender en condiciones a 110 personas con edades comprendidas entre los cero y los 60 años, se necesita dinero. Un millón de euros para ser exactos. Que la mayor parte de esa cantidad, 700.000, la aporta la Xunta, pero que para conseguir los 300.000 restantes tienen que buscarse la vida. En todos estos años han ideado mil y una formas de completar el presupuesto, pero es la primera que se les ocurre montar una subasta de arte. La respuesta les ha dejado sin palabras. Es imposible (sólo por una cuestión de espacio) ofrecer el listado de artistas generosos. Pero para que se hagan una idea, las personas que esta tarde (20.30 horas) asistan a la subasta en el Centro Cultural de A Guarda, podrán pujar por obras de Ánxel Huete, Antón Buciños, Puri del Palacio, Silverio Rivas, Xuxo Vázquez, Xoán Piñeiro, Ana Legido, Antúnez Pousa, Xaime Quessada, Paco Leiro, Isaac Pérez Vicente, Pedro Solveira, Cuqui Piñeiro... La colaboración de ésta última fue determinante para contactar con buena parte de los artistas. Cada artista ha fijado el precio de partida de su obra. Todos lo han hecho a la baja. Muy a la baja. No hay que olvidar el objetivo. La más cara partirá de 1.500 euros, en tanto la más barata, firmada por Silverio Rivas, lo hará desde un simbólico euro. Pocas ocasiones como esta tienen los amantes del arte de hacerse con piezas de calidad a buen precio. Es fácil vaticinar que la iniciativa de San Xerome Emiliani será un éxito. Seguro. El trasatlántico, de bandera italiana y armador alemán, acaba de salir de los astilleros de Hamburgo. Realiza, pues, su viaje inaugural. La compañía no quiso pasar de largo por Vigo en tan representativo viaje. Por algo será. Según el todavía presidente del Puerto, Abel Caballero, porque esta ciudad nuestra no para de subir enteros en la cotización internacional de escalas crucerísticas. Y eso que todavía no disponemos del muelle que va a posibilitar (eso nos han prometido) el atraque en línea de tres trasatlánticos en la Estación Marítima. Aprovechando que la cosa va de estreno, el capitán, Kurc Pzremyslaw (de nombre tan impronunciable como agradable de trato) ofreció una recepción a bordo, a la que asistieron, entre otros, José María Suárez Llanos, el teniente Pintos, Remigo Cores, Dolores Roig... y, por supuesto, una nube de fotógrafos que inmortalizaron las estancias comunes de este señor de los mares, con capacidad para 2.500 pasajeros. Por si tienen el capricho de hacer un crucero en el Aidaviva, sepan que tiene 18 suites y 439 camarotes con balcón, que la superficie destinada a restauración ronda los 4.000 metros cuadrados y más de 8.000 la cubierta exterior con su piscina, sus jacuzzis, su gimnasio... en fin, el pack completo de unas merecidas vacaciones. Los que ya pueden permitirse vacaciones son los alumnos de Economía y Adminstración de Empresas recién graduados. Ayer exhibieron uno de sus mejores manojos de nervios a propósito del acto de graduación. Uxía Araúxo y Héctor Otero fueron los encargados de hablar en nombre de todos. Hicieron un repaso a los cinco años vividos en las aulas, sin olvidar las visitas a la cafetería. Javier Riera, en su calidad de padrino, les dio un buen consejo: «No caer jamás en la autocomplacencia». También les dijo (con otras palabras) que ahora les espera el mundo real. Pues bienvenidos.