Los usuarios intercambian referencias sobre clubes, barras americanas y casas de citas En el último año han constatado que las mujeres cambian de ciudad cada cierto tiempo
03 jun 2006 . Actualizado a las 07:00 h.Una ley de Suecia castiga a los clientes que son sorprendidos por la policía en los prostíbulos. Y colectivos feministas como Alecrín han presionado para que el hombre que paga por un servicio sexual sea considerado también un prostituidor y un explotador de la mujer. Sin embargo, en Vigo, los clientes no solo no son perseguidos sino que intercambian sus experiencias en un foro de Internet (Putalocura.com, sección Pontevedra). Muchos de los usuarios buscan consejo y referencias porque «ir a ciegas es como la ruleta rusa». Los participantes han escrito 40 páginas en el último año donde se dan consejos y referencias sobre las lumis (en su jerga, prostitutas), los clubes de alterne y casas de citas de la ciudad. «¿Alguien me puede aconsejar un pisito que esté bien?», pregunta un experto que habla bien de las brasileñas «esculturales» de un club de carretera a las afueras. «Están todas muy buenas, lo difícil es elegir», le contesta otro visitante en el siguiente post o mensaje. Para poder participar deben registrarse. La mayoría lo hace con seudónimos. Los usuarios de la web aportan muchas pistas sobre los lugares de la ciudad donde se mueve la prostitución. Uno menciona a «la morena del Ancla» y otro «a la de los vaqueros del Toys». El que la conoce comenta la relación calidad y precio del servicio sexual sin ahorrar detalles. Suelen mencionar si la mujer está operada o no. Otro internauta dice que viaja mucho a Vigo y pregunta cómo se llega a una barra americana del extrarradio. «Cuando esté de regreso os cuento las experiencias, a ver si he tenido suerte», escribe en su post. Algunos, incluso evalúan y ponen notas a la calidad de los servicios de las trabajadoras sexuales. También puntúan su belleza o los modales. No ahorran críticas: de una dijeron que «de cara, aprobado raspado». Hay quienes se llevan un fiasco y vierten comentarios degradantes hacia la dignidad de la mujer. Uno se quejaba de que «estar con ella es como estar dentro de un ladrillo». Otros alertan sobre una lumi que atiende desde un número de teléfono: «Es cierto lo que se dice de ella. Es fea y además está bastante pirada. Cuidadín si caéis por ahí». Otras, como Carol, muy afortunadas por la madre naturaleza, reciben multitud de elogios: «Eso sí es ir con delicadeza y lo pasareis bien. Le gusta la limpieza y el trato agradable y te lo recompensa». Anécdotas El coste varía según el humor de la mujer prostituida. Según los testimonios, la media hora con penetración sale entre 40 y 60 euros. En Bouzas, es posible conseguir una felación por 15 euros con condón. Un cliente comentaba en el foro la siguiente anécdota: una prostituta le cobró por un servicio 40 euros. Al día siguiente, el mismo hombre buscó en los anuncios por palabras una profesional de lujo, cotizada en 400 euros. Llamó por teléfono y la voz de su interlocutora le sonaba mucho. Intrigado, pidió la dirección de la casa de citas. Era la misma vivienda de la juerga anterior y la mujer cobraba 10 veces más por lo mismo. Otro que telefoneó a una mujer que se anunciaba en la prensa no oyó bien la dirección. Al día siguiente, la interlocutora le había subido ya diez euros. Las mujeres que obtienen matrícula de honor son las profesionales que, además de tener clase y cultura, «no miran el reloj y que se implican» cuando están con un cliente. La casa de citas que, a juicio de los internautas, goza de mayor fama es una sita en la calle Paraguay. También está en lo alto del ránking un motel a la salida de la ciudad, aunque hay quejas sobre el precio: «material de primera pero en copas y el servicio te puedes gastar 100 euros». Otras, situadas cerca de la estación de ferrocarril, han perdido muchos puntos pese a las continuas ofertas del mes. Remordimientos La web es digna de un estudio sociológico por la dificultad de acceder a este mundo casi clandestino. Un dato que sale a la luz es que las prostitutas rotan de ciudad y que los clubes renuevan su plantilla periódicamente. Prueba de ello son los usuarios que preguntan en el foro por la pista de alguna mujer que les prestó servicio días atrás. Un participante preguntaba dónde estaban «las rusas de Samil». Otros buscaban a una brasileña con la que compartió lecho en un club y que se había trasladado. El negocio debe ir bien porque un mensaje comenta que una madame iba a poner una sucursal en A Coruña. Curiosamente, todos hablan del placer que sienten junto a esas mujeres pero ninguno hace mención a las condiciones a que son sometidas. La explotación sexual es un tema tabú. Y quien menciona la palabra «remordimientos» es para decir que no los sienten. También escribe otro que pregunta por los horarios de un club. «Espero que abran a las siete de la tarde para que parezca que vuelvo del trabajo antes de ir a casa», dice.