Días de precuaresma

La Voz

VIGO

21 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

Celebración bien singular, dicho sea de paso. Casi tanto como aquella de los doce títulos más uno de Ángel Nieto. Pero a lo que iba. El pasado fin de semana en el hotel Los Galeones se celebró algo parecido a una cita a ciegas (o casi), pero entre viejos compañeros. Porque allí quedaron los integrantes de la promoción de 1980 que estudiaron COU en los Maristas. Cerca de medio centenar de jóvenes (de cuarenta y tantos tacos) asistieron al encuentro. Muchos no habían vuelto a verse desde que abandonaron el colegio, así es que seguro que hubo más de una sorpresa. Que si éste calvo, que si aquél cuajado de canas, que si el otro con una curva de la felicidad bien pronunciada... En fin, la vida misma. Y todos se preguntaban por qué no habrían contactado antes. Supongo que volverán a repetir. Porque en una noche (aunque fue larga) es imposible contar todo lo vivido desde que se perdieron de vista. ¡Al abordaje! Y sin olvidar ningún adminículo. Ni siquiera el parche de pirata. Eso sí, el asalto se produjo en tierra, no en el mar. Los barcos y sus tripulaciones tomaron el asfalto como si en ello les fuera la vida. Es lo que tiene la precuaresma (léase Carnaval), que vale todo. O casi. La iniciativa fue del conservatorio Mayeusis, cuyos alumnos más jóvenes (entre los 2 y los 7 años) participaron ayer en su particular Ocean Race. De dar la salida se encargó Corina Porro que, para meterse en situación, no dudó en plantarse el parche piratero en el ojo. Ya en la calle, los viandantes saludaron con sonrisas la divertida iniciativa que, a modo de desfile, recorrió las calles Areanal, Serafín Avendaño, García Barbón e Isaac Peral. Menos mal que nos queda el Carnaval. Aunque algunos lleven disfraz todo el año. Pues sí, como la canción. Pero en este caso detrás de los fogones. Porque Tana Costas se ha pasado prácticamente siete décadas en la cocina. «Nací en ella», afirma Tana. Por tantos años de trabajo (de buen trabajo) es por lo que el pasado sábado recibió uno de los Premios de Gastronomía de Galicia. El del apartado a toda una vida. Aunque son muchos platos los que borda, su especialidad es la lamprea. O eso dicen. La del Miño, porque si no es del Miño se niega a cocinarla. Eso es fidelidad. La misma que tienen sus clientes que, pese a que se ha tomado un año sabático, llaman bien a menudo a su puerta para que cocine para ellos. Y Tana no sabe decirles que no. Planes de futuro Ya les conté que la diseñadora viguesa Pilar Bande quiere dar el salto al mercado internacional. Con ese fin viajó a Milán, coincidiendo con la celebración de la pasrela Milano Moda Donna. Según dice, los organizadores han escuchado con mucha atención sus propuestas, de suerte que no sería extraño que sus trajes pudieran compartir escenario en el futuro con los de Armani o Versace. Pues a ello.