El gol de Quiles, en una de las escasas ocasiones blanquiazules, y las paradas de Mackay bastan a los coruñeses para ampliar su extraordinario inicio liguero
18 sep 2021 . Actualizado a las 21:56 h.El Deportivo más gris de la temporada se hizo con el triunfo que más le puede valer de cara a este curso (1-0). Por el poderío de su adversario y el aviso a navegantes que supone: ya son cuatro jornadas de triunfos y ni un solo gol encajado. Este entrenado por Borja Jiménez se ha convertido en un equipo sin grietas al que para doblegar no basta con dominarlo de principio a fin, ni asediarlo durante toda la segunda parte, como hizo este Badajoz. Después un partido jugado casi los noventa minutos en sentido único, el que llevaba hacia la portería de un gran Mackay, se erigen como el gran rival a batir de esta Primera RFEF. Quiles aprovechó el único error contrario para dar otros tres puntos a su equipo.
Tras el 0-3 de Calahorra, Borja Jiménez agitó la alineación, de nuevo con un puñado de novedades. Las más llamativas señalaron a la defensa, donde Villares se estrenó como lateral derecho, y fue titular Granero, sin presencia hasta ahora en el once. El Badajoz se encerró con 1-5-4-1 capaz de cortocircuitar la fluidez de juego del Dépor, que no enlazó cinco pases seguidos más que en contadas ocasiones durante los primeros 45 minutos. Además, desde una presión muy adelantada, se hizo dueño del partido y empezó a sumar ocasiones. A los ocho minutos, un error de Lapeña en la salida permitió a Sergio Benito plantarse ante Mackay, aunque escorado, y el meta desvió con la punta de los dedos. También Héctor Hernández evitó males mayores tras un centro peinado por el delantero del cuadro extremeño, cuando Zelu se relamía en el segundo palo.
Aún fueron más claras las siguientes. Una falta directa desde la frontal botada por Aitor Pascual que Mackay despejó con apuros, y, especialmente, la segunda, cuando Zelu, con toda la portería para él, chutó fuera después de recoger un centro al segundo palo. El dominio era visitante, mientras el Deportivo apenas atravesaba el círculo central para algún ataque relámpago.
Como el que supuso el 1-0, obra de Quiles, que había avisado poco antes. Héctor Hernández corrió hasta la línea de fondo y el delantero andaluz, que ha marcado en tres de las cuatro jornadas, batió por primera vez en toda la temporada la meta del Badajoz. El gol hizo daño a los visitantes, sorprendidos en un asedio cada vez más insistente, pero que hasta el descanso no se volvieron a acercar a Mackay. Los coruñeses recuperaron la batuta del partido, pero la chispa de William nunca conectó con Miku.
David Concha y Sergio Benito avisaron antes de que se cumpliese la hora de juego. El Badajoz volvió a marcar el ritmo y al Deportivo, inabordable en su área, donde se defendió con uñas y dientes, le sonrió la suerte esta vez. Tras una jugada personal de Quiles, que estuvo a punto de acabar con el segundo gol, una pérdida de Granero permitió correr a los visitantes. Al cabo de varios rebotes, Adri Cuevas chutó ante Mackay, que en su salida desesperada acabó sentado sobre el balón. Poco después, el meta desvió a córner una falta botada por Rubén Pardo.
El Deportivo, que por entonces ya jugaba con Bergantiños como tercer central, contestó con un disparo alto de Miku tras carrera a la contra de Héctor. A cinco minutos del final salió Noel, que espabiló a la grada y a un equipo que llevaba muchos minutos del segundo tiempo muy alejado de la portería de Limones.
Ficha técnica:
Deportivo: Mackay, Villares, Lapeña, Granero, Héctor Hernández, Bergantiños, De Vicente, Juergen (Trigueros, min 90), Quiles (Noel, min 85), Miku (Víctor García, min 85) y William (Mario Soriano, min 65).
Badajoz: Limones, Aitor Pascual (Gorka Santamaría, min 84), Dani Fernández, Pardo, Barri, Gorka Pérez, Adri Cuevas (Truyols, min 75), Zelu (Clemente, min 70), Antonio Otegui (Tahiru, min 75), David Concha y Sergio Benito (Josema Gallego, min 84).
Gol: 1-0, min 29: Quiles.
Árbitro: González Díaz (Comité asturiano). Mostró tarjetas amarillas al deportivista Lapeña, así como al visitante David Concha.
