La súper concursante gallega regresa a «Saber y ganar»

TELEVISIÓN

Victoria Folgueira apareció en nuestras casas a la hora de la siesta durante casi dos años

07 dic 2014 . Actualizado a las 15:24 h.

Enseguida les hablo del fantástico día que pasé con el mediático cocinero cambadés Yayo Daporta en la bodega Martín Códax. Antes me refiero a una mujer, también televisiva, pero no por ser presentadora, sino por haberse convertido en una de las mejores concursantes de la historia del programa más longevo de la televisión, Saber y ganar. La coruñesa Victoria Folgueira Fariña apareció en nuestras casas a la hora de la siesta durante casi dos años, desde un 6 de diciembre del 2006 hasta el 2008. En total, cien programas «sin contar los especiales», puntualiza. Ganó 86.000 euros. «Aún me queda algo en el banco y gracias a esto pude mantenerme estos años y vivir como autónoma», destaca esta arqueóloga y restauradora de 39 años que ahora mismo trabaja en el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología (Muncyt) de A Coruña. El próximo viernes la volveremos a ver en Saber y ganar, que estos días emite por la Primera y en horario de tarde unos programas especiales en los que participan doce concursantes históricos (los magníficos) con motivo del 18 aniversario del espacio. «También nos dieron la oportunidad de volver al programa diario y me apunté. Intentaré llegar a los cien de nuevo», comenta sonriente. Sus especialidades son la historia, el cine y el arte. Es difícil verla fallar en alguna de estas materias. «No entreno, voy con lo que sé, porque es tan amplio que es imposible abarcar todos los temas. Intento estar al día de la actualidad por si cae alguna pregunta». Años después se reencontró con el incombustible Jordi Hurtado. «El dice que sí que cambió, pero yo lo veo igual. Es mucho por el carácter y la alegría que tiene», destaca la súper concursante gallega.

Desde la bodega Martín Códax en Cambados hay unas vistas preciosas. Con la mirada puedes recorrer a Illa de Arousa, O Grove, A Toxa, Sálvora... Durante el mes de noviembre sus responsables organizaron unos showcookings que, dado el éxito, «estamos pensando incluso en hacerlos itinerantes porque las plazas se agotaron en poquísimo tiempo», adelanta Juan Vázquez, el director general de esta firma de la que dependen 600 familias. Por allí pasó Pepe Solla, que esta semana recibió su tercer sol de la guía Repsol, como les había adelantado aquí hace unas semanas, Javier Olleros y este último domingo Yayo Daporta. «Se nota lo de la tele, sobre todo los fines de semana», me comenta el colega de Chicote en Top chef cuando le pregunto por la repercusión del programa en su restaurante. Tras un recorrido por las instalaciones llegó la cata de cinco vinos de la bodega, entre ellos el nuevo Vindel, maridados con otros tantos platos elaborados por el cocinero y su equipo, entre los que se encontraba su hermana Esther Daporta, «que tiene una nariz prodigiosa», comenta Yayo sobre la sumiller. Con una puesta en escena muy cuidada preparó mousse de coliflor, reducción de vino tinto, berberechos y aceite de albahaca, ­­­­mejillones en tempura, crujiente de arroz y algas y aire de mejillón, -que fue el plato que más me gustó-, sardina ligeramente asada empanada, cocochas de merluza al pil pil con guisantes tiernos estofados con tocino ibérico y vieira a la gallega versión 2014. «Apuesto por una cocina marinera, que los clientes perciban donde están. Se trata de potenciar el sabor del entorno. El cocinero tiene que reflejar de donde es», apunta Yayo, cuya familia tiene una depuradora de marisco. La enóloga Katia Álvarez fue presentando los distintos vinos. Un mediodía para disfrutar de buenos productos e ideal para dormir después la siesta viendo Saber y ganar.