A capela con Rosa Cedrón

Miguel A. Fernández REDACCIÓN

TELEVISIÓN

La ex cantante de Luar na Lubre hizo realidad el sueño de Paula Deiros, con la que interpretó «Negra sombra» en el mejor momento de la gala del sábado

06 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Todo sigue su curso en Son de estrelas , que al finalizar la gala del sábado confirmaba líder a la caldense María Xosé Chenlo, con 21 puntos; seguida de la muradán Manuela Alsina, a solamente tres; y del noiés Fernando Docampo, a cuatro. O mucho cambian las cosas si el resto de los participantes reciben mareas de votos por SMS, o Son de estrelas se disputa ya abiertamente entre los tres o cuatro primeros. Una manera de inyectar emoción al cotarro sería que Iría Pinheiro pasara a primera en el orden de votación del jurado, destinando a Nonito Pereiro al cierre. Pesa demasiado la opinión del veterano y carismático productor en las decisiones del resto, aunque éstos no se lo crean. Sin quitarle sabiduría y criterio a sus opiniones (y a las de sus colegas), a los televidentes nos queda la impresión de que Nonito marca tendencia y de que el voto de Iría sabe a papel mojado por última. Hasta los concursantes, en delatores primeros planos, parecen aguardar el veredicto de un juez implacable¿ Cosas del espectáculo en un Son de estrelas que, a juzgar por las cifras de audiencia, va como un tiro. ¿Qué más dio de sí la gala aparte de los seis duetos? A Rosa Cedrón, invitada como sorpresa para Paula de A Terra Chá, que afirmó ser fan de la ahora cantante en solitario y una de las voces mejor dotadas del país. Ambas se marcaron las primeras estrofas de Negra sombra a capela y sonaron a verdad, pese a que la ex Luar na Lubre se plegó cortésmente a las aptitudes vocales de su admiradora. Dio bastante juego Manuela, sobre todo con la visita de las cámaras a su abuela en Muros, que no dudó en piropear a su nieta afirmando que tiene «carnes que se deixan comer crúas», aparte de llamarnos la atención sobre sus pechos y desear a Manuela que se eche «un noivo da Coruña para abaixo». Simpática señora. A Manuela, de acentuada geada, también le tocó superar una divertida yincana de pañales y otras cosas.