Un grupo de expertos concluyen que «Waterloo», del grupo ABBA, es la canción más representativa del festival de Eurovisión. Salomé está incluida en el «top ten». Massiel, no
20 may 2005 . Actualizado a las 07:00 h.?n los cincuenta años que lleva dando la turra el festival de Eurovisión con cantantes de todas las épocas, estilos, pelajes e influencias, ¿cuál ha sido la mejor? o, mejor planteado, ¿cuál ha sido la más prototípica? La pregunta puede parecer una memez, pero hay investigadores que se han dedicado a trabajar el asunto y, cómo no, a llegar a conclusiones en forma de top ten . El encargado del estudio ha sido el fisiólogo y experto musical de la universidad británica de Bristol Harry Witchel, quien ha concluido que los parámetros básicos de la perfecta canción de Eurovisión son el ritmo, la fácil memorización, un estribillo perfecto, cambios afinados, una rutina de danza y un final rotundo. Y, con esos mimbres, la canción perfecta es Waterloo , del grupo sueco ABBA, que ganó el festival en 1974 y que significó el arranque de un grupo mítico en la historia de la música pop europea de las dos últimas décadas. Para este experto, el hecho de que el título y motivo principal de la canción tenga sólo tres sílabas deja mucho espacio para su memorización y para que sea emocionalmente evocadora, al margen de sus aciertos en cuestiones como la armonía o el ritmo. Por cierto, en el ránking de las diez mejores canciones elaborado por el doctor Witchel, aparece en el séptimo lugar Salomé con su Vivo cantando , coganadora en 1969, pero ni rastro del La, la, la de Massiel. El caso es que, expresándose con tanta soltura y disponiendo de tantas claves, al profesor no debería resultarle demasiado complicado vaticinar quién se va a llevar el gato al agua en la edición de este año, cuya final se celebrará el sábado. Efectivamente, su favorita es la canción que representa a Bosnia, Call me , interpretada por Feminnem. Ya veremos.