El príncipe Andrés, presionado para dejar su mansión gratuita en Windsor, podría convertirse en vecino de Juan Carlos I en Abu Dabi
SOCIEDAD
El jeque Sheikh Mohamed bin Zayed Al Nahyan le ha ofrecido, según el diario «The Sun», el uso de un vasto palacio real próximo a un canal del reino desértico
25 oct 2025 . Actualizado a las 14:53 h.El debate sobre el príncipe Andrés sigue candente en el Reino Unido. Tras su renuncia a todos sus títulos nobiliarios por las acusaciones por su presunta vinculación al pederasta estadounidense Jeffrey Epstein, muchos británicos siguen preguntándose por qué tienen que seguir pagando los gastos y la manutención del hermano de Carlos III. La prensa se ha sumado a ello con un intenso escrutinio de los ingresos y la residencia del miembro de la nobleza caído en desgracia.
De hecho, la casa real británica ya estaría presionando a Andrés para que abandone Royal Lodge, una mansión de 30 habitaciones en los terrenos del castillo de Windsor, en la que el reside el príncipe y por la que no ha pagado alquiler en los últimos 20 años. Según revela The Times, de hecho, el contrato de alquiler que se le hizo fue redactado «para esconder el hecho de que no pagaba renta» mediante una modalidad legal pero infrecuente. En él, por los extractos publicados por el medio británico, se estipula que el alquiler es de «un grano de pimienta (si se exige)» al año desde 2003, aunque una versión más corta entregada al Registro de la Propiedad omitía incluso el monto de la renta, y el diario se pregunta «cómo se le permitió hacerlo dado su papel público».
Las negociaciones de la Casa Real con el príncipe Andrés, reveladas por el diario Daily Telegraph, apuntan a que se le propondría una nueva residencia, así como una compensación por obligarlo a abandonar la mansión, ya que tiene su arrendamiento hasta el 2078.
Hay una posibilidad de que el príncipe Andrés llegue a convertirse en vecino del rey emérito Juan Carlos I. Según el diario sensacionalista The Sun, el jeque Sheikh Mohamed bin Zayed Al Nahyan, presidente de Emiratos Árabes Unidos y emir de Abu Dabi, le habría ofrecido el uso de un vasto palacio real próximo a un canal del reino desértico. Ubicado en un área diplomática, la mansión, de 1.500 metros cuadrados, tiene seis dormitorios, un gimnasio interior con piscina, un cine doméstico, una gran cocina y empleados del hogar residentes, entre ellos, un equipo de cocineros.
Según el medio británico, cederle el uso gratuito de este palacio es la forma del Gobierno del país árabe de mostrar su gratitud por la «generosidad» de Andrés con Abu Dabi cuando era el enviado de negocios internacional del Reino Unido.
Cuentas opacas
Además del tema de su residencia oficial, la BBC también destaca las opacas cuentas del príncipe Andrés. Según revela el medio, que cita documentos judiciales, el hijo de Isabel II habría recibido al menos 60.500 libras (unos 70.000 euros) del empresario británico Adrian Gleave, vinculado a un fondo «que defraudó a pensionistas». Sucedió en el 2019, poco después de que se dieran a conocer sus estrechos vínculos con el pederasta estadounidense Jeffrey Epstein.