Norman Reedus cumple su amenaza y le roba un icónico elemento a David Broncano en «La Revuelta»

Paulino Vilasoa Boo
P. VILASOA REDACCIÓN

SOCIEDAD

El actor Norman Reedus, en «La Revuelta», junto al que fue su trofeo
El actor Norman Reedus, en «La Revuelta», junto al que fue su trofeo RTVE

«Es el programa de televisión más raro en el que he estado en mi vida», valoró el actor de Daryl Dixon en «The Walking Dead», al que se le escaparon varios «spoilers» y que prometió a Broncano aparecer como zombi en su serie

24 sep 2024 . Actualizado a las 16:10 h.

David Broncano tenía preparada una inesperada visita para La Revuelta en el programa de este lunes. Nada menos que el actor Norman Reedus, que da vida a Daryl Dixon en la serie The Walking Dead, y que supone la primera gran estrella de habla no hispana en pisar el plató del talk show desde que inauguró su nueva vida en TVE. «Es el programa de televisión más raro en el que he estado en mi vida», valoró como muy preciso resumen de la particular idiosincrasia del formato dirigido por el presentador jienenese nacido en Santiago de Compostela. El actor salió de allí con 10 euros menos, pero no se fue con las manos vacías: se llevó como trofeo un cojín con forma de perro que le encandiló desde el principio de la entrevista.

Reedus venía a presentar la inminente temporada del spin-off que protagoniza, The Walking Dead: Daryl Dixon, titulada en esta nueva tanda The Book of Carol. Y, nada más llegar, ya se saltó una de las normas no escritas, pero sagradas, del programa. Llegó con las manos vacías, sin llevarle ningún regalo a Broncano. «Nadie me dijo que tenía que hacerlo», se quejó como disculpa. Pero, por suerte para el conductor de La Revuelta, lo que no llevaba vacíos eran los bolsillos. Y así consiguió Broncano esquilmarle 10 euros que llevaba encima como recuerdo. Un peaje por participar en el programa que el actor no tardaría en cobrarse de vuelta.

Nada más llegar, el intérprete de la serie de zombis le echó el ojo a uno de los elementos más icónicos del programa, un cojín con forma de perro que le habían regalado a Broncano hace más de tres años los componentes del grupo La M.O.D.A. «¿Puedo llevarme esto?», le preguntó Reedus, interesado por el can que le ponía ojitos y al que, visto desde otro ángulo, definió como «una oca poseída». El presentador rechazó que se lo llevara, aunque poco después dejaba la puerta abierta.

El perro fue uno de los protagonistas de la entrevista al actor, y robó cámara en varios momentos, como cuando, en una de las solicitudes más extrañas hechas jamás por Broncano —y ya es decir—, lo conminó a que hiciera un llamamiento público a la gente que no confiesa estar incómodo por tener un paluego —restos de comida— entre los dientes. Fue ahí, y no sin razón, cuando Reedus definió al programa como «el más extraño» en el que había estado en toda su vida.

Pero aceptó el surrealista envite y, con el cojín perruno en la mano, mirando ambos a cámara, se dirigió a esa parte de la sociedad: «Deberíais decirlo cuando tengáis algo entre los dientes; o si no, mirad a los ojos de este perrito y explicadle por qué sois tan gilipollas», exclamó, provocando las risas del auditorio.

Reedus jugueteó con el perro en varias ocasiones, haciéndolo cómplice de sus reacciones ante las barrabasadas de un Broncano, especialmente en las clásicas preguntas sobre sexo y dinero, en las que no quiso revelar gran cosa. Pero lo que pocos se esperaban es que, en un acto subrepticio, el actor se iba a llevar finalmente el perro consigo. Norman se despidió de Broncano, lanzó un agradecimiento al público y, en un rápido movimiento que pasó desapercibido para casi todos en medio de la algarabía general, cogió el cojín y se lo llevó consigo. Un momento que se puede percibir perfectamente, si nos fijamos, en el programa, ya colgado en el canal de RTVE Play.

Poco después, orgulloso de su hazaña, no dudó en compartir su operación encubierta con sus seguidores en redes sociales. «Me lo he llevado», puso en una primera y críptica Historia de Instagram en la que mostraba su inicio en el programa, tocando un enorme tambor. La siguiente publicación daba más pistas. Dos fotogramas de Reedus eclipsado por el perro cojín. Y, por último, desvelando ya el misterio, mostró su trofeo: el entrañable cánido ya en su propio sofá.

«Spoilers» involuntarios de su serie

Para desgracia de los productores de su serie, llegó un momento en el que Reedus se encontraba tan desconcertado, y a la vez cómodo, en el programa de Broncano, que bajó la guardia y empezó a soltar información clasificada de su serie.

El actor se encuentra en estos momentos grabando en varios lugares de España, donde discurrirá la tercera temporada de The Walking Dead: Daryl Dixon. Recorrerá lugares de toda la Península, entre ellos, también en Galicia: ya se ha hecho el cásting en Santiago de Compostela. Y, por ello, Broncano quiso sonsacarle alguna información de cómo llegaba ahí desde Francia, donde se ubican las dos primeras temporadas. El entrevistador eligió la ruta más lógica. «Entiendo que tendréis que ir por los Pirineos», dedujo. Pero no era así. «No, viajamos vía Londres para llegar a España», reveló el actor.

Enseguida se dio cuenta de que estaba destripando información que se supone que no se debe saber, ya que la segunda temporada aún está a punto de emitirse. «Posiblemente estoy contando un spoiler, y posiblemente no debería estar diciendo esto», exclamó el actor, «olvidad que he dicho eso».

Pero ni Broncano ni su equipo podían dejarlo ahí, ante la ilógica ruta del protagonista para llegar a España desde Francia. «Bueno, nos metemos en un barco», empezó revelando Reedus, antes de darse cuenta de que se estaba yendo mucho de la lengua de nuevo. «No os puedo decir esto, no puedo», reaccionó enseguida, mientras los responsables de la serie, desde las gradas, le decían con gestos nerviosos que cortase con su verborrea. «Me puedo meter en un buen problema», confesó entre risas.

Eso sí, antes de terminar, le prometió a Broncano que le cumpliría uno de sus deseos: aparecer como zombi en una de las futuras temporadas de la serie.