Recogida de aceites y ropa
A la actual recogida selectiva obligada de vidrio, papel y envases domésticos, se generalizará en el 2022 la de residuos orgánicos (en 2024 en pueblos pequeños), que dispondrán de su propio contenedor. Se trata de algo vital, pues el 40 % de los desperdicios españoles son biológicos y solo se recupera el 17 %. Irá acompañada de un objetivo de reducción del desperdicio alimentario del 20 % para el 2030 en hogares y empresas.
Antes de la Nochevieja del 2024, la ley obliga a que haya también recogidas específicas de aceites de cocina usados, de toda clase de textiles, de residuos voluminosos como muebles y colchones, y de residuos domésticos peligrosos (pilas o aparatos electrónicos). Desde el 2022 también será obligatorio que en obras y demoliciones se separe madera, minerales, metales y vidrio y antes del 2025 se fijará un porcentaje mínimo de recuperación de artes de pesca.