El arzobispo de Santiago apoya la investigación sobre los abusos sexuales a menores en la Iglesia

redacción LA VOZ

SOCIEDAD

MARCOS CREO

Julián Barrio pide que se respete el ordenamiento jurídico, pero «sin privilegios ni discriminaciones» porque «la pederastia no es solo una cuestión de la Iglesia»

11 feb 2022 . Actualizado a las 19:53 h.

El arzobispo de Santiago, Julián Barrio, aseguró este viernes que las propuestas para crear comisiones de investigación en el seno del Congreso y en el Defensor del Pueblo sobre los abusos sexuales es «bien recibida» por parte de la Iglesia, en el marco de su «colaboración leal» con el Estado.

«Eso sí, respetando el ordenamiento jurídico y lo que tantas veces hemos dicho y hemos insistido: sin privilegios, pero sin discriminaciones», ha matizado a continuación.

Durante el turno de preguntas en la rueda de prensa de la presentación del Encuentro de Empresarios Católicos, un evento que tendrá lugar en Santiago del 31 de marzo al 1 de abril, el arzobispo ha denunciado que «hoy se pretende identificar abusos con Iglesia», lo que pone «bajo sospecha a las instituciones eclesiales».

«Por desgracia, la pederastia no es una cuestión de la Iglesia, es una cuestión social. Y digo esto no como excusa, digo esto como una realidad que hay que tener en cuenta», dijo a continuación Barrio, puesto que «solo un caso ya sería suficiente» para «la necesidad de pedir perdón y atender» a las víctimas.

En este sentido, Barrio ha recordado que la Diócesis de Santiago, igual que el resto, cuentan con «un departamento en el cual todas aquellas personas» que hayan padecido estos abusos puedan presentar «la denuncia correspondiente», tras lo cual se activa «un protocolo ya perfilado y que ya está en práctica».

«Dispuesto a escuchar»

El arzobispo compostelano ha apelado a que «esto nunca vuelva a repetirse» y ha garantizado que la Iglesia considera que «solamente un caso» ya es «motivo no solamente para pedir perdón, sino tratar de acompañar a esta posible víctima no solo legalmente y psicológicamente, sino con todo aquello que pudiese ayudarle».

«Yo mismo he manifestado otras veces que estoy dispuesto a escuchar a todas las posibles víctimas que, de una u otra manera, sientan la posibilidad de ser escuchadas y ayudadas», ha proseguido Barrio.

Concretamente, el arzobispo fue preguntado sobre los casos concretos de abusos sexuales ocurridos en los años 70 y 80 que el Colegio La Salle anunció el pasado sábado que investigaba tras haber recibido nuevas denuncias. Dos de ellos se habrían registrado en Galicia --tienen centros en Santiago y en Ferrol-- y el tercero, en Castilla y León.

Al respecto, no ha respondido el arzobispo sino su auxiliar, Francisco José Prieto, quien no se ha referido a las denuncias que en últimos días están saliendo a la luz sobre el centro de la capital gallega, sino que se ha limitado a recordar que la Archidiócesis tiene una oficina de coordinación de atención al menor.

Así, Prieto ha defendido que se procede «conforme a una serie de protocolos» que son «muy exigentes» y que contemplan una «responsabilidad de aproximación hacia las víctimas» y «de perdón», así como de «buscar esa justicia y esa verdad» que ayude a «hacer frente a una lacra presente en esta sociedad, pero que también ha afectado a la Iglesia».

Posteriormente, al volver a ser preguntado sobre los supuestos abusos en el Colegio La Salle, el auxiliar del arzobispo ha apuntado que quienes proceden a investigarlos son los «superiores de la congregación», que «han procedido a ello».

Y es que, según ha afirmado, los protocolos establecidos no solo son preventivos, sino que «también ayudan a esa escuchar de las víctimas, a ponerse en contacto con ellas y a proceder siempre a la investigación de los hechos».

Todo ello, ha añadido Prieto, «siempre con la discreción debida» y con «respeto a la víctima en primer lugar», puesto que «a veces» esta investigación «puede estar incursa en el ámbito civil».