«La historia norteamericana borró por completo a España de su escena»

Mila Méndez Otero
mila méndez REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

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El historiador de origen gallego Larrie Ferreiro, finalista del Pulitzer en el 2017, publica en castellano el libro en el que reivindica la huella española en su país

09 dic 2019 . Actualizado a las 13:57 h.

En el 2017 el libro titulado Brothers at Arms fue finalista al premio Pulitzer en la categoría de Historia. ¿La temática? La intervención de España en el conflicto que hizo posible el nacimiento de Estados Unidos. El apellido de su autor, un profesor de historia naval en la universidad de Georgetown (Washington D. C.), resultó revelador: Larrie D. Ferreiro. Aquel año Ferreiro desveló a La Voz que su bisabuelo fue uno de los gallegos de la emigración masiva a América. Su tesón en rescatar la huella hispana en el país presidido por Donald Trump surgió a partir de una investigación para su doctorado y de una realidad: en los libros de historia de sus hijos no había «ninguna mención a España en la Guerra de la Independencia». Ediciones Desperta Ferro acaba de publicar en castellano la esperada traducción, titulada Hermanos de armas.

-¿Qué queda hoy de la pegada española en Estados Unidos?

-Nuestros Estados y ciudades portan nombres como Colorado, Florida y Los Ángeles. Hoy, el renacimiento de muchas zonas abandonadas por su declive industrial está siendo liderado por hispanos. Allí hay carteles que anuncian una «carnicería» o una «panadería». Además, hay mas hispanohablantes en EE. UU. que en toda España.

-¿Qué papel jugó España en la Guerra de la Independencia?

-Al principio no quiso participar. Incluso le ofreció un trato a Gran Bretaña: mantenerse neutral a cambio de Gibraltar. El rey George III se negó. Entonces, España entró en el conflicto junto a Francia, con el resultado conocido: la corona británica perdió la guerra y los EE.UU.

-¿Se puede decir que Gran Bretaña perdió EE.UU. por el Peñón?

-Sí, y que los EE.UU. no existirían sin España. El gran poderío inglés fue su fuerza naval, la Royal Navy. Por separado, las marinas española y francesa eran menores, pero no así juntas. En cuatro años (1779-1783) las dos flotas borbónicas le arrebataron a los ingleses Pensacola (Florida), la isla de Menorca e hicieron retroceder a las tropas británicas en Jamaica, la capital del Caribe inglés, Honduras o Bahamas.

-Pero, todo eso se perdió.

-La expansión de los Estados Unidos en el siglo XIX fue, en gran parte, una causa de la contracción del imperio español. España perdió Luisiana (1801), Florida (1819) y México (1821). Para los norteamericanos, España era un país sin poder ni recursos y, Gran Bretaña, bajo el mando de la Reina Victoria, fue el imperio más poderoso del mundo.

-¿Hasta dónde alcanzó el dominio español en EE.UU.?

-¡Fue mucho mayor que el británico! Antes de la independencia, comprendía desde Luisiana a la frontera con Canadá, y de Nueva España hasta California y la frontera con Oregón. El británico se limitó a la costa este, hasta las montañas Apalaches.

-¿Por qué se ha silenciado esto?

-La época de la expansión estadounidense se llamó Manifest Destiny, la doctrina del Pronunciamiento del destino. Defendió la ideología de que los angloamericanos tenían el derecho divino de ocupar toda Norteamérica, de este a oeste. Los territorios previamente españoles se interponían en la expansión. Los políticos evitaron toda referencia a España, incluso a la población autóctona, en favor de pintar el territorio como una «tierra virgen lista para ser civilizada».

-¿Los libros de historia de los colegios de EE. UU. no mencionan el papel de nuestro país?

-Solo los libros más antiguos sobre la Guerra de la Independencia (1775-1783) resaltaron el papel de España, casi por igual con el de Francia. Ambos fueron aliados del ejército continental de George Washington. Todo cambió con el trabajo del influyente historiador estadounidense George Bancroft. Su obra History of the United States of America, escrita de 1834 a 1878, sacó por completo a España de la escena, hasta demonizó sus acciones. Los estadounidenses han olvidado la importancia de España en el nacimiento de nuestra nación.

-En la cultura popular, en el cine, los españoles no existen.

-Los estadounidenses preferían las películas y novelas que proyectaban a nuestro país como un santuario. No querían verse como un poder invasor de los territorios hispanos.

-¿Está cambiando esto con el protagonismo que están alcanzando los latinos en su país?

-No se trata de que los latinos se destaquen como personas separadas, sino de que toda nuestra nación se adapte a los valores y principios de nuestra herencia latina.

-¿Se conserva algún vínculo?

-Para la mayoría de los estadounidenses que no han visitado España, no es fácil separar la cultura española de la latinoamericana. Pero, cada vez se conoce más gracias al turismo -España está a punto de igualar a Francia como destino vacacional- o a chefs como José Andrés. El Banco Santander está expandiéndose por nuestras ciudades y millones de norteamericanos, como mi esposa y yo, esperamos ansiosamente la nueva temporada de La casa de papel.