Las gramíneas campan a sus anchas

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

INTERNET

La llegada del buen tiempo, con viento moderado, ha devuelto a la realidad a las personas que sufren alergia. Esto es lo que aconsejan los expertos

23 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las praderas en su máximo esplendor, con las hierbas altísimas, justo antes de que las máquinas segadoras empiecen a hacer su trabajo. El tiempo seco, caluroso, con ráfagas de viento del nordeste, que hacen viajar al polen varios kilómetros a la redonda. Y el mes de junio, el período del año junto con julio en el que más sufren los alérgicos de ls gramíneas. Este es el cóctel fatal para los sacrificados sufridores de esta familia de plantas que agrupa más de 10.000 especies distintas, muchas de ellas presentes en las praderas al final de la primavera y al principio del verano. Crecen por todas partes, es casi imposible evitarlas. Aunque los ataques son más livianos en la costa que en el interior.

Ojos irritados y lagrimosos, congestión nasal, estornudos intermitentes, picor en el paladar... son los síntomas más habituales, que a menudo se rebajan con el uso de antihistamínicos u otros tratamientos. Es lo que se conoce como la fiebre del heno.

«La presencia en la atmósfera de pólenes de gramíneas de crecimiento espontáneo (no cultivadas) es la causa más importante de polinosis [alergia a pólenes] en Galicia», asegura la doctora Marta Rodríguez Lantarón en la web de la Sociedad Gallega de Alergia e Inmunología Clínica.

El caso es que los días lluviosos de junio aliviaron mucho a los alérgicos, pues el agua de lluvia precipita al suelo al polen que viaja vía aérea. Pero la llegada del buen tiempo, con viento moderado, ha devuelto a la realidad a las personas que sufren esta dolencia.

Las recomendaciones de los expertos son a menudo consignas muy difíciles de cumplir. Aconsejan no salir al campo días soleados y con viento, pero es difícil, incluso para un alérgico, no dejarse tentar por el aire libre los escasos días de sol que hay en Galicia. El polen se libera durante el día, pero es de madrugada cuando alcanza su mayor concentración. El rocío matinal -si lo hay, pues en verano se reduce al mínimo- puede reducir considerablemente la concentración en el aire.

En el mapa que acompaña a esta información puede observarse que Galicia es la comunidad con niveles más altos de polen de gramíneas en esta época del año, con tres provincias -Lugo. Pontevedra y Ourense- con niveles altos.

Hay otros consejos que se llevan mejor: ponerse gafas de sol; mantener las ventanas cerradas y airear la casa solo por la mañana; o no dejar la ropa tendida en el exterior en épocas de polinización como esta. Pasear en bicicleta y, sobre todo, cortar el césped, agravan sobremanera los síntomas.