Beatriz Mato urge desde Bruselas a los concellos a unirse al pacto por el clima

Cristina Porteiro
cristina porteiro CORRESPONSAL / BRUSELAS

SOCIEDAD

La conselleira fue a Bélgica en busca de fondos para impulsar las energías limpias en la comunidad

23 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Poca industria y muy contaminante. Es el cuadro que pintan las estadísticas. Galicia no conoce los matices. Es una de las campeonas en consumo de energías renovables (un 38 %) en una Unión Europea donde todavía se aspira a conseguir el exiguo objetivo del 20 % para el 2020. Esa es la cara amable de los informes de Europa. La más adversa muestra Galicia como una región donde aproximadamente el 30 % de la energía que se produce proviene del carbón. Las centrales térmicas de As Pontes, Meirama y la Refinería de Repsol de A Coruña están en el punto de mira por sus altos índices de emisiones contaminantes.

Son cifras difíciles de casar con los esfuerzos renovados de las autoridades por poner coto a las emisiones y al cambio climático. A los compromisos globales por impulsar las energías limpias también se han sumado en los últimos años los Ayuntamientos, a través del bautizado como Pacto de Alcaldes por la Energía y el Clima, una iniciativa a la que se han sumado tan solo 22 concellos gallegos desde el 2008. El esfuerzo es insuficiente para la conselleira de Medioambiente, Beatriz Mato, quien este jueves urgió desde Bruselas a los alcaldes a sumarse al pacto y cumplir con sus compromisos de reducción de emisiones de CO2 del 40 % para el 2030 y la elaboración de un plan integral de adaptación al cambio climático. «A Xunta vai investir 250.000 euros anuais durante catro anos nunha oficina técnica que vai servir de asesoría e fará de coordinador ante Bruxelas para dar este impulso definitivo», recordó Mato, tras reunirse con el comisario europeo de Acción por el Clima y la Energía, Miguel Ángel Arias Cañete, con quien exploró las diferentes vías de financiación con las que cuenta Galicia para costear proyectos de renovables, economía circular y eficiencia energética.

El panorama no es muy halagüeño. Bruselas ya ha advertido de que los fondos estructurales sufrirán una severa hemorragia en los presupuestos europeos del 2020-2027, así que Cañete sugirió echar mano del milagroso Plan Juncker, un fondo capaz de convertir 1 euro invertido en 15, según los cálculos optimistas de la Comisión Europea.

El horizonte presupuestario que podría dejar a Galicia sin un euro de ayudas estructurales no preocupa al comisario, quien este jueves aseguró que «los fondos de cohesión seguirán existiendo». Lo que no se sabe es si la partida será meramente testimonial. «Galicia demandará ocupar o oco que lle corresponde nese reparto de fondos (...) Estaremos en alerta e vixiantes», indicó Mato el mismo día en el que el presidente español, Mariano Rajoy, se reunió con algunos de sus socios europeos en Bruselas para hacer un primer intercambio de opiniones sobre el futuro de los presupuestos de la UE.

La llamada para cumplir con los compromisos por el clima también alcanza al sector privado, a la industria, responsable del grueso de emisiones contaminantes. Pero, ¿qué incentivos promueve la Xunta para impulsar la transición hacia energías más limpias? Ni Mato ni Cañete quisieron romper una lanza a favor de una fiscalidad favorable para las renovables. Ambos se escudaron en que son «competencias nacionales».

Calidad de las aguas

«Supoño que se debaterá, pero para facelo son necesario dous. Hai que falar de todas as políticas, ningunha se pode rexeitar, tampouco esta», matizó Mato, quien mantuvo una reunión con el director general de Medioambiente de la Comisión Europea, Daniel Calleja. Su equipo mantiene abierto un expediente a España por la mala calidad de sus aguas. Entre los puntos negros se incluyen Vigo, Ribeira y Santiago.

A pesar de los 600 millones de euros que hasta el último año se han invertido en políticas de saneamiento de las rías, las autoridades gallegas y españolas no han sido capaces de ponerle solución. Mato es optimista: «Estou convencida de que esa sanción non será definitiva».