Un cole sin asignaturas ni exámenes

lucía palacios MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Los centros de los jesuitas en Cataluña anuncian para el próximo curso un proyecto pedagógico alternativo, que incluye una nueva etapa educativa

09 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No hay pupitres, ni asignaturas, ni clases magistrales, ni deberes. Tampoco horarios ni calificaciones. Es la nueva escuela, la del siglo XXI: espacios amplios, luminosos y coloridos, con gradas e incluso sofás; todo dispuesto para trabajar en grupos sobre un proyecto conjunto y ayudados de las nuevas tecnologías. Este es el método educativo que desarrollan los jesuitas en varios de sus colegios de Cataluña bajo el nombre Horizonte 2020, un proyecto que se empezó a gestar en el año 2009. Entonces, 200 directivos de su red de escuelas comenzaron a hacer un diagnóstico y plantearse la necesidad de una transformación del proceso de enseñanza y aprendizaje.

José Menéndez, subdirector de Jesuïtes Educació, la red de escuelas de la Compañía de Jesús en Cataluña, explica que «es insostenible» seguir con la actual organización del currículo, con la estructura de clasificación del alumnado, con la distribución horaria y con la indefinición de modelos pedagógicos que no presentan «una alternativa eficiente al mediocre objetivo de retener a los alumnos en clase». Sostiene que no lo han hecho por falta de matrículas en sus colegios, ni por malos resultados, sino porque se dieron cuenta de que quizá no estaban «influyendo en el proyecto vital de los alumnos», en el reto de formarles no solo en los conocimientos, sino también en la «lucha por conseguir el equilibrio y la equidad».

Para trabajar en esta «apuesta profunda para transformarlo todo» implicaron a 1.100 alumnos, 1.500 educadores, a familias, empresas, políticos, Iglesia... Cerca de 13.000 personas se pusieron manos a la obra para reflexionar y debatir sobre la educación que deseaban. ¿Cómo tendrían que ser las escuelas en el 2020? Y de ahí salió una lluvia que aportó 56.000 ideas. El cambio se puso en marcha este mes de septiembre en tres de sus ocho colegios de Cataluña y en una etapa que consideran «estratégica»: 5.º de Primaria y 1.º de ESO. Comenzaron derribando los muros para transformar las aulas en ágoras, lugares más amables donde los alumnos se puedan sentir cómodos para trabajar juntos, en grupos, en un proyecto que desarrollarán a lo largo de la semana. Ya no hay dos clases de 30 alumnos cada una, sino una de 60, pero mucho más amplia y con tres profesores. Ellos son los que acompañan a los alumnos a lo largo de todo el día, compartiendo reflexiones, noticias, realizando debates y tutorizando los proyectos en los que trabajan; si un alumno tiene problemas con algún tema, uno de los profesores se libera para ayudarlo.

Efectivamente, los chicos aprenden también la raíz cuadrada y el teorema de Pitágoras pero a través de un proyecto interdisciplinar. No hay asignaturas, ni horarios (salen al recreo cuando ellos lo piden porque están cansados), ni deberes.

La idea es exportar este proyecto en el que el alumno es el centro, con un papel más activo y autónomo, al resto de sus colegios de Cataluña el próximo curso y, posteriormente, del resto de España. Muchos centros educativos están viajando hasta allí para aprender y ver cómo lo pueden poner en funcionamiento. Además, el proyecto Horizonte 2020 está colgado en una web (h2020.fje.edu/es) para que pueda ser consultado.

Como será

4 años intermedios. Con los actuales 5.º y 6.º de primaria y 1.º y 2.º de la ESO han hecho una nueva etapa intermedia (NEI).

Colectividad. En vez de dos clases de 30 alumnos ofrecen una clase de 60 que tiene 3 profesores. Están todo el día con los estudiantes.

Informe detallado. No hay notas, pero los padres están muy informados sobre su hijo: qué objetivos logró, su grado de motivación, qué carencias tiene y qué fortalezas. Con un logaritmo esto lo traducen en notas, porque es un requisito oficial.

En equipo. Se trabaja en grupo -cada semana desarrollan un proyecto- y usando las nuevas tecnologías. En clase hay sofás y gradas, sin pupitres aislados.