Un Naufraxio con final festivo

Ángel Palmou

SOCIEDAD

Miles de personas asistieron en Laxe a esta singular celebración, declarada de interés turístico

18 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Fernando Busto García, de 71 años y ya jubilado tras dedicar buena parte de su vida a la marina mercante, falleció ayer al mediodía, en plena jornada grande de las fiestas de Laxe, ahogado en las aguas del puerto ante miles de personas... Así comenzaría y proseguiría esta crónica de no mediar un par de detalles: estas son las páginas de Al Sol y ayer fue 17 de agosto.

Así que, como ha ocurrido desde hace más de 40 años con los que lo precedieron en el papel estelar de esta jornada, Busto también «resucitó» una vez que sus compañeros de hundimiento lo depositaron en la rampa del muelle a los pies de la imagen de la Virgen del Carmen, y pudo entonar con ellos una emotiva Salve Marinera. De esta forma concluía, rondando ya la dos de la tarde y con los barcos de la procesión marítima listos para el relevo festivo, el acto central del Simulacro do Naufraxio, una celebración declarada de interés turístico desde el año pasado y que no deja de sumar espectadores.

Ayer, domingo de puente, miles las personas tomaron cuanto espacio había disponible en el muelle laxense -hasta las escaleras de la grúa del puerto sirvieron de grada improvisada- para asistir a un singular espectáculo que una vez más despertó una mezcla de curiosidad, sorpresa y emoción entre los presentes. Incluso en un niño que, atento a la retransmisión que le iba realizando su padre, sentenciaba ya hacia el final y cargado de razón, «pero cómo va a resucitar si no es de verdad».