El textil está «condenado» a innovar y a ser más original

Patricia Iglesias LA VOZ / REDACCIÓN

SOCIEDAD

Un concepto irrumpe en el sector: Textrónica, que obedece a la necesidad de crear y de utilizar nuevos materiales para ganar competitividad

12 feb 2012 . Actualizado a las 16:25 h.

Textrónica es un término que proviene de la unión de las palabras textil y electrónica. De un tiempo a ahora, las empresas que se dedican a la producción de tejidos se están viendo en un aprieto por la fuerte competencia proveniente de Asia. Es por eso que empezaron a replantearse hacia dónde debían dirigirse, y llegaron a la conclusión que tenían que aportar algo nuevo al producto, volverlo más funcional.

De aquí surgió la idea de los Smart Textiles (Tejidos Inteligentes). Se puede decir que se ha investigado bastante en este campo y que se han conseguido resultados espectaculares, pero aún hay mucho por descubrir, no tanto a nivel de tecnología sino más bien en lo que a aplicaciones se refiere. Es decir, hay todo un mundo de posibilidades, existe la tecnología, tan solo es necesario tener una buena idea y muy probablemente se pueda realizar.

Diseño y aprendizaje

El término textrónica se refiere a una materia interdisciplinar en el proceso de producción y diseño de materiales textiles. Responde a una sinergia entre diferentes especialidades como son la industria textil, la electrónica y la programación junto con conocimientos de elementos de automatización y metrología.

Centro Tecnológico del Textil de Andalucía (Citta) y Escuela Universitaria de Diseño e Innovación ESNE), colaborador oficial por segundo año consecutivo de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid y la única escuela de diseño presente en la Fashion Week, presentan Textrónica.

Se trata de un taller-seminario en el que se muestran las excelencias del diseño y producción de prendas y complementos realizados a partir de tecnologías diferentes y materiales textiles como tejidos inteligentes, luminiscentes, térmicos, fibras ópticas y tejidos a los que se aplican sensores.

Fashion ESNE Atelier, en el marco de Mercedes Benz Fashion Week, es el espacio elegido en el ha tenido lugar la semana pasada, esta presentación-taller que tiene por objetivo descubrir a todos los asistentes la gran cantidad de posibilidades que ofrecen los tejidos, gracias a la investigación e innovación, al aplicarles las nuevas tecnologías.

En este marco, Citta hizo una presentación de algunas prendas y complementos innovadores seleccionados para la ocasión.

Lo más novedoso

Gracias al reciclaje se pueden conseguir nuevas texturas y resultados únicos en los que al textil se refiere. Buena cuenta de ello lo da Sonic Fabric, un tejido fabricado con un 50% de cinta de casete reciclada y otro 50% de fibra de poliéster que, además de ser un tejido innovador y duradero, también es audible: se puede escuchar pasando el cabezal de un radiocasete o walkman por la superficie. Una idea ligada al desarrollo de nuevas propuestas relacionadas con el reciclaje y la reutilización para la creación de nuevos productos.

Además, la utilización de energías renovables se abre camino también en el mundo de la moda. Así, ya hay varios prototipos de bolsos con panel solar que permite generar luz en el interior del bolso al abrirlo. Todo un invento para la moda maxi en la que las mujeres salen de casa con media casa encima.

Pero en la alta costura también se empieza a jugar con esta nueva tecnología y es que no hay nada más impactante que un traje de fibra óptica, un top y una falda, que se iluminan.

Esta nueva forma de fabricar moda o como dicen los expertos, esta materia interdisciplinar en el proceso de producción y diseño de materiales textiles, comenzó a desarrollarse en torno al año 2000. Responde a una sinergia entre diferentes especialidades como son la industria textil, la electrónica y la programación junto con conocimientos de elementos de automatización y metrología.

Interés creciente

Durante los últimos años se han logrado grandes avances en el campo de esta tecnología y su aplicación se ha extendido a diversos ámbitos como la incorporación de sensores a prendas de vestir, alfombras, paredes tapizadas, etcétera, para controlar la luz, temperatura, seguridad, etc. Por ejemplo, alfombras inteligentes de detección de personas, que pueden ser utilizadas como alarma de intrusión, como contador de entrada a edificios, centros comerciales, etcétera.

También en prendas que monitorizan funciones vitales de manera continua mediante un sistema de sensores integrados en el textil, muy utilizado y demandado por los deportistas.

Y por supuesto, tejidos térmicos formados por hilos y tejidos con propiedades electrotérmicas y que, por tanto, pueden generar calor conectándose a baterías de tamaño variable. La moda, definitivamente, está cambiando.