El pirata que vivía como un rey

La Voz

SOCIEDAD

21 ene 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

Millonario, extravagante, pero sobre todo polémico, el creador de Megaupload, Kim Dotcom, es un brillante hombre de negocios cuyo deseo de hacer dinero rápido le ha convertido en uno de los piratas más famosos de la Red. Así lo demuestra su historial, manchado por igual de escándalos y éxitos empresariales y que comenzaba en 1989, cuando con solo 23 años fue acusado de haber robado miles de tarjetas en la Red.

En aquella ocasión, el joven consiguió la libertad condicional y trató de reconducir su vida con la creación de una empresa dedicada a seguridad en Internet. Pero los ánimos de redención le durarían poco. En el 2000, antes del estallido de la burbuja inmobiliaria vendía todas las participaciones de su empresa por varios millones de dólares. Con ese dinero lanzaría dos proyectos, el primero, una web que animaba a los hackers del mundo a cazar a Bin Laden. El segundo, la compra de una página de venta en línea que le costaría su segundo disgusto con la Justicia, cuando en el 2002 la policía alemana lo detuvo en Bankog por fraude, cargo del que salió indemne.

Tres años después fundó Megaupload, cuando ya se creía intocable. Capaz hasta de comprar su propia ciudadanía en Nueva Zelanda tras adquirir diez millones en bonos estatales, convertiría el lujo en su estilo de vida, y el coleccionismo de coches, en su pasatiempo. Tras su detención, sus 20 vehículos descansan en el depósito municipal.