Magia o ignorancia

SOCIEDAD

14 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Magia. Eso son las vacunas para Bill Gates. Por eso ha volcado todos sus esfuerzos en conseguir extender esta magia por medio mundo, por el medio más pobre, claro, porque en el rico a las vacunas algunos las miran mal. Gates calcula que con la puesta en escena de ayer 250 millones de niños podrán cumplir los 5 años sin más contratiempos que los típicos de los pobres: suciedad, mala alimentación, violencia, abandono...

Es curioso que mientras en sabe-dios-dónde un niño tendrá por fin su ración de vacuna, en este primer y atolondrado mundo otros niños se queden sin esa protección porque sus padres no la quieren. ¿Se imagina a una madre de Uganda o a un padre de Bangladés diciendo «a mi hijo no se le vacuna»? Lo más fino que le llamaríamos es ignorante, supersticioso, cuando no insensato o asesino. ¿Habrá muchos padres así en la India, que no quieran vacunar a sus hijos contra la diarrea o la neumonía? Yo creo que no. Creo que eso de hacernos los valientes con la salud de nuestros hijos es más fácil si los demás niños están vacunados, si no se te han muerto un par de sobrinos, dos hermanos y cuatro vecinos de sarampión, por ejemplo. Claro que todo se andará y cualquier día nos desayunaremos con una muerte infantil en España por falta de vacunación masiva. Será el triunfo de la ignorancia, y no de la magia.