Martín Salvado: «La selectividad me da más miedo que la Copa de Europa»

SELECTIVIDAD

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Se ha subido a lo más alto del podio en más de cien kilos, pero el éxito no se le sube a la cabeza

07 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Martín Salvado nació con el siglo, en el año 2000. Cursa segundo de bachillerato en el Xelmírez I y a la par saca tiempo para practicar el deporte en el que se inició cuando tenía siete años. Su progresión es geométrica, pero prefiere el discurso del partido a partido, en este caso el del campeonato a campeonato, sin dar rienda suelta a las expectativas.

-Primer año júnior y medalla de oro en el Campeonato de España. ¿Cuánto cuesta un éxito como este en horas de entrenamiento a la semana?

-Entre ocho y diez, aproximadamente. Pero depende un poco de las fechas. Cuando tengo exámenes, entreno algo menos. Si hay algún campeonato, procuro sacar más horas.

-¿Cuántos combates?

-En este campeonato, al ir como cabeza de serie por los puntos que tenía, empecé en cuartos de final.

-¿Alguno fue especialmente complicado?

-A este nivel todos son difíciles. La final, el que más, ante Guillermo Cordero, que es de Valladolid pero está federado en Galicia. Nos conocemos de hace tiempo, coincidimos en la selección y hay rivalidad.

-¿Cuál es su mejor cualidad sobre el tatami?

-Creo que la cabeza. Es lo que me suelen decir, que estoy muy tranquilo cuando compito. Cuando me ha fallado he sacado los peores resultados.

-¿Hasta dónde espera llegar en el yudo?

-No es algo en lo que me haya parado a pensar, qué quiero hacer y qué va a ser de mí. De momento, seguir estudiando y seguir con el yudo hasta dónde se pueda.

-¿Unos juegos olímpicos...?

-Obviamente, para cualquier deportista son un sueño. No sé. Ojalá.

-¿Qué le dice su entrenador?

-No es algo sobre lo que hablemos. Nos centramos en lo que nos queda más cerca, en las competiciones a corto plazo.

-¿Y cuál es la próxima gran cita?

-La Copa de Europa, en Coímbra, a mediados de mes.

-¿Cuáles son las expectativas?

-Como siempre, hacerlo lo mejor posible. A ver si da para la ansiada chapa. Pero es difícil.

-¿Tiene experiencia internacional?

-Sí. El año pasado, en el que era cadete, fui a la Copa de Europa de Fuengirola y conseguí el bronce. También competí en Coímbra y fui quinto. Esos puntos me valieron para ir a las FOGES, que es como un festival olímpico de las juventudes europeas, como unas microolimpiadas europeas.

-¿Qué tal le fue?

-Peor de lo que esperaba.

-¿La cabeza?

-Sí, por ahí.

-¿Es de los que le echa muchas horas a los estudios?

-Por suerte, tengo el privilegio de no necesitar muchas horas a nivel estudiantil. Obviamente, cuesta. Y más este año, en el que hay mucha materia y más presión por la selectividad.

-¿Le da más miedo la selectividad o la cita continental de Coímbra?

-Es una pregunta difícil. Creo que más la selectividad. El campeonato, al fin y al cabo, es un privilegio. Al ser júnior de primer año, tendré más oportunidades. Con la selectividad te la juegas más, hay más presión.

-¿Tiene ya decidido qué carrera quiere hacer?

-Algo relacionado con la economía.