La restauración de los paramentos interiores y bóvedas de la Catedral costará más de 2,6 millones

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

En la actuación en las cubiertas se invertirán otros 1.926.000 euros y durará hasta agosto del 2020

01 feb 2019 . Actualizado a las 14:41 h.

En cuestión de días empezarán las obras en el interior de la catedral de Santiago que han obligado a trasladar el culto a otros templos. La actuación sobre los paramentos y bóvedas de la basílica costará 2.630.000 euros (IVA incluido). La ejecución comenzará a lo largo de la próxima semana, durará un año y se enmarca dentro del convenio entre Hacienda, Xunta, Cabildo y Fundación Catedral dotado con 17 millones para dejar a punto el histórico edificio de cara al año santo 2021.

La intervención sobre paramentos interiores y pilares de la Catedral afectará a la nave principal, transepto, girola y tribuna. También se actuará en los revocos de las bóvedas, afectados por las filtraciones de agua a través de las cubiertas y se sustituirán los morteros de cemento por unos de cal, más apropiados.

En la tribuna, se saneará o sustituirá el pavimento de piedra, al tiempo que se reorganizarán canalizaciones y cableado. Además, se renovarán las carpinterías de bronce instaladas a finales del siglo XX por unas de madera «que permitan mayor ventilación», subraya la Fundación Catedral.

El proyecto, que se irá ejecutando por fases y zonas, incluye la restauración de esculturas, rejerías, vidrieras u otros elementos singulares que hay en el ámbito de actuación. Se ejecutará por fases, acabando por los transeptos, primero el sur y finalmente el norte. Los materiales de obra entrarán y saldrán a través de la praza de Azabachería (donde se instalará una grúa para moverlos hasta las cubiertas), quedando la de Praterías como única puerta para que el público acceda a la basílica, ya que se podrá seguir visitando y entrando al camarín del Apóstol y a la cripta en medida de lo posible. 

Tras retirar todos los bancos, confesionarios, viacrucis y otros artículos para despejar la zona que se intervendrá, no será hasta el lunes cuando entre la empresa encargada del proyecto para comenzar con el resto de preparativos, entre los que se instalará un andamio frente al órgano para protegerlo con un cierre geotextil que lo protegerá del polvo y suciedad que levante la obra, al igual que ya se hizo con el Pórtico -cubierto con una estructura de madera-.

Restauración de las cubiertas

También se iniciará este mes la restauración de las cubiertas de la nave principal y crucero, cuyas visitas fueron ya suspendidas el 1 de enero. Esta obra durará 18 meses, hasta agosto del 2020, y se invertirá en ella otros 1.926.000 euros con el objetivo de subsanar el problema de las filtraciones de agua hasta el interior de la basílica. Como ya avanzó el director de Fundación Catedral, Daniel Lorenzo, se llevará a cabo una nueva solución que permitirá levantar las losas para realizar futuras tareas mantenimiento y control de la impermeabilización. Estéticamente no habrá un gran cambio, pues la cubierta pétrea reproducirá la forma actual y seguirá siendo transitable y escalonada.

La actuación en las cubiertas comenzará también por el tramo occidental de la nave principal, más próximo al Pórtico, así como por el transepto sur, y continuará por el resto de la nave principal y el transepto norte, haciéndolas coincidir con las obras en los paramentos interiores y bóvedas, en cuanto sea posible.