Giro radical en la búsqueda del desaparecido en Frades: tomó un taxi en Ordes al faro de Fisterra

La Voz SANTIAGO

FRADES

El hombre, de 69 años, complexión fuerte y 1,70 de altura, vestía pantalón gris, camisa de cuadros y chaqueta azul oscuro. La búsqueda se retoma hoy en la zona del faro de Fisterra. Cuatro patrullas, el Servicio Aéreo de la Guardia Civil, los drones de Axega, una patrulla de Policía Local, y otra de Protección Civil, recorren la costa

24 abr 2025 . Actualizado a las 15:13 h.

Giro radical en la búsqueda del sexagenario de Frades desaparecido en la tarde del martes. Y es que la difusión de la imagen de José Antonio Carro Lata, vecino de Papucín de 69 años, hizo que un taxista de Ordes contactase con el operativo de búsqueda para informar de que lo había trasladado en esa misma tarde al faro de Fisterra. Una noticia que provocó que no se retomase la búsqueda en la zona de Frades y Olas (Mesía) iniciada en la mañana del miércoles con efectivos de Guardia Civil, también con perros, y Protección Civil, asi como un dron de la Axega que se había incorporado a última hora de la mañana. Fuentes municipales de Frades, que habían solicitado colaboración vecinal para buscar al hombre en la zona, aseguran que la búsqueda se trasladó a Fisterra a la vista de esa nueva pista, con participación de la Guardia Civil y colaboración del Concello fisterrá con la incorporación al dispositivo de su Policía Local y Protección Civil.

 

Este jueves la búsqueda continúa en la zona del faro de Fisterra, donde cuatro patrullas -una de ellas, del Seprona, con motos-, el Servicio Aéreo de la Guardia Civil, los drones de Axega, una patrulla de Policía Local, y otra de Protección Civil, recorren la costa. 

Ayer, ya se barajaba que el supuesto avistamiento del sexagenario en Olas, en Mesía, el martes a las cinco de la tarde pudo ser erróneo. El camino que habría tomado el desaparecido cuando dejó su casa el martes a mediodía sería el de Ordes.

El desaparecido, jubilado tras haber trabajado como transportista y que vive con su mujer e hijos en Papucín, mide 1,70 metros de altura y es de complexión fuerte. En el momento de la desaparición vestía pantalón gris, camisa de cuadros finos marrones y amarillos y una chaqueta azul oscuro con las letras DAF; calzaba zuecos.