El Compos, sin su metrónomo, el líder sin su pichichi

M. GARCÍA SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

Las tarjetas privan a ambos equipos de dos de sus referentes

13 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Alrededor de trescientos abonados han retirado sus invitaciones para el partido de mañana a mediodía en el Vero Boquete de San Lázaro, que enfrentará a la Sociedad Deportiva Compostela y al líder, el Adarve. Y todavía queda la jornada de hoy, hasta las 20.45 horas, para que los más rezagados recojan las suyas en el Centro Comercial As Cancelas.

A tenor de la clasificación, tercero contra primero, puede ser catalogado como el partido de la jornada. Y, curiosamente, los dos contendientes tendrán que pagar el peaje de las sanciones por acumulación de amonestaciones con dos jugadores clave.

Rodri Veiga no podrá contar con Pablo Antas, el metrónomo del equipo, la bisagra que conecta y equilibra el juego de defensa y el de ataque. Sabe leer el fútbol y marcar los tiempos. Roberto Baleato, que se mueve en esa misma demarcación y es una de las alternativas que sopesa el cuerpo técnico, decía esta misma semana, sobre su compañero, que «es el mejor del equipo».

El conjunto madrileño es, junto con el Pontevedra, el más goleador del grupo. Suma diecinueve tantos en su haber y siete de ellos llevan la firma del delantero centro Álvaro Montejo, que vio la quinta tarjeta amarilla frente a los granates y no podrá jugar en San Lázaro. Marcó por partida doble frente a la Gimnástica Segoviana y también vio portería en los partidos ante el Navalcarnero, el Arousa, el Ceares, el Salamanca y el Pontevedra.

Al igual que Primo, el ariete madrileño jugó en el fútbol islandés. Es también un delantero de brega, que hace mucho daño cuando ve la oportunidad de ganarle la espalda a las defensas. No es muy alto, pero su sobrenombre, el alfiler, es significativo a la hora de definir el trabajo que le da a los zaguero rivales.

Aun sin Montejo, el Compostela espera a un rival rocoso y difícil de doblegar. Solo encajó más de un gol en su única derrota, en Avilés: 2-1. Es un equipo que concede muy poco y que sabe jugar en el cuerpo a cuerpo.