No vale tarde

Ignacio Carballo González
Ignacio Carballo LA SEMANA POR DELANTE

SANTIAGO

27 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay ocasiones en las que el dicho popular «más vale tarde que nunca» está de más, porque ese «tarde» ha sido tan tarde y ha causado tantos perjuicios en su tardanza, que el refrán, aplicado al proyecto de la depuradora de aguas residuales de Santiago, parecería ofensivo. Cuesta hallar en la hemeroteca las primeras referencias sobre la apremiante necesidad de tomar medidas para evitar que los desechos de Compostela acabasen sin depurar en el río Sar debido a la insuficiencia de la planta de Silvouta. Como mínimo veinte años, seguro. Y en los últimos diez, las idas y venidas de los anteproyectos y de los cambios de ubicación por las decisiones que en su día se tomaron en el Concello -léase en el bienio de Conde Roa- que, como en el caso de otras grandes infraestructuras -la estación del AVE- no hicieron más que demorar una obra que debía poner fin con urgencia a una vergüenza colectiva inasumible en una ciudad moderna, más todavía cuando es patrimonio de la humanidad. Y es verdad que todos los ciudadanos tenemos una parte de responsabilidad, por no haberle dado a este tema la importancia que tiene, quizá porque una mayoría no es consciente porque no lo ve. Lo sería si los desechos, en vez de contaminar río abajo el caudal que cantara Rosalía hasta su desembocadura en el Ulla, desbordaran en las propias viviendas. En todo caso, que esta sea la vencida y la nueva depuradora de Silvouta esté concluida, como se prevé ahora, en el 2025, con un coste que superará los 56 millones de euros. Vale, que se debata sobre si es mucho o no tanto lo que le toca apoquinar al Concello. Pero, por favor, que se haga ya.