31 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.
El Obradoiro sufrió un apagón al pasar por el vestuario.
Completo un gran primer tiempo, en el que las triangulaciones ofensivas, la buena lectura de los cambios defensivos visitantes, el acierto de Tuky y Hopkins y la habitual buena defensa colectiva permitieron llegar al equipo al descanso con una buena ventaja. En el segundo tiempo, la intensidad defensiva sobre los bases santiagueses provocó la desconexión del juego colectivo, y ni Andres ni Palacio fueron capaces de devolver al buen camino a sus compañeros.El no poder circular bien el balon y tener que abusar del bote para jugar 1x1 provocó muchas perdidas y que la superioridad física del equipo visitante se acabase imponiendo con una buena direccion de Pedro Llompart.