Las chicas de la imagen no se lo podían creer. Hace unos días estaban cenando en el restaurante A Esmorga de Muros y reconocieron en la mesa de al lado a Miguel Ángel Silvestre. «¡Es el duque!», exclamó una de ellas. Llegó entonces la segunda parte, echarle el valor o la cara suficiente para pedirle que posase con ellas. El actor que se hizo famoso por su participación en la serie Sin tetas no hay paraíso accedió sin problemas a la foto. Ya está acostumbrado a este tipo de situaciones. Y es que el duque arrasa en Muros y alrededores, donde está trabajando a las órdenes de José Luis Cuerda en su nueva película Todo es silencio. Es una suerte que un director como Cuerda, de los grandes (y no lo digo por el tamaño) tenga fijada su residencia en Galicia, porque a la hora de buscar localizaciones se queda con lugares cercanos. La última vez que estuve con él fue el verano pasado en Sada, donde presentó su vino del Ribeiro, Sanclodio. Recuerdo que me contó que montó la bodega con el dinero que ganó gracias a la película de Alejandro Amenábar Los otros, de la que fue productor. Volviendo al duque y a la atracción que despierta entre las mujeres, el martes me llamó una trabajadora de un aeropuerto gallego (no digo cuál para no dar pistas sobre su identidad) para preguntar si sabía a qué hora llegaba el actor. Sí, se lo juro, hasta entre el personal aeroportuario arrasa el galán, que se aloja estos días en el hotel La Muradana de Muros. Lo cierto es que las féminas consultadas coinciden en que no es tan tan tan guapo en persona como en la serie que lo catapultó. «Es un poco bajito», dice, para tumbar un poco más al mito, una de las que se lo cruzó entre rodaje y rodaje. Tiempo tendremos para seguir analizando la figura del duque, porque todavía le quedan muchos días de rodaje en Galicia. Me cuentan que en A Coruña rodará en un local del corazón de la ciudad, en la calle Real, y también en un pazo y una antigua discoteca de las afueras. Esta es, sin duda, una semana de cine. Saludé en el restaurante A Casa do Arxentino de Mera al director Jorge Algora, que me contó que dentro de unos días comenzará el rodaje de una película por la zona. Y mientras tanto el público gallego va a las salas a ver la última de Almodóvar y, de paso, descubrir las referencias a Galicia que aparecen en la cinta.
Que si el juego de café de Sargadelos o la ropa vintage que los productores encontraron en una tienda de A Coruña. Y para rematar el cinematográfico septiembre gallego, Emma Lustres, productora ejecutiva de Vaca Films, que está de moda desde el éxito de Celda 211, anuncia que en noviembre empezará el rodaje de Invasor, su último proyecto. El asunto va de un médico militar que está en Irak y regresa herido a Galicia. Al despertar del coma intenta saber qué sucedió e intenta sacarlo a la luz. Con un presupuesto de 4 millones de euros, el filme lo dirigirá Daniel Calparsoro, que contará con Alberto Ammann, Inma Cuesta, Antonio de la Torre y Karra Elejalde en los papeles principales. Lo más llamativo es que se trata de una película de mucha acción cuyo rodaje se llevará a cabo casi en su totalidad en el centro de la ciudad de A Coruña. Me dicen que la escena final es la de un coche chocando contra el Obelisco. De cine.
Fotos con famosos
Gracias a la cámara en el móvil el autógrafo quedó relegado a un segundo plano. Es mucho más divertido enseñarle a un amigo la imagen con el duque, como la de las chicas de Muros, que un garabato en una servilleta. Hasta un catedrático de Derecho Civil y habitual colaborador del programa que presenta Fernanda Tabarés en V Televisión como Domingo Bello Janeiro cayó en la tentación de fotografiarse con otro de los guapos oficiales del país, Cayetano Rivera. Mi mujer duda durante varios segundos pero al final, entre el actor y el torero, se decanta por el segundo. «Fue en Ronda el sábado pasado, poco antes de la corrida goyesca a la que me invitaron. Tengo la suerte de tener amistad tanto con él como con su hermano Fran», comenta Domingo, de apellido Bello, como Cayetano o el duque, que estos días arrasa en Muros.