¡Menuda piedra en el Camino!

SANTIAGO

El Concello de Teo busca desde hace meses emplazamiento para una escultura regalada por el Xacobeo sin previo aviso

21 may 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Podría ser, pero cuando María Dolores Pradera cantaba U na piedra en el camino me enseñó que mi destino era rodar y rodar.. rodar y rodar... no estaba pensando en Teo, municipio que recientemente ha incorporado a su abultado patrimonio una escultura en piedra diseñada por el artista Paco Pestana.

Aunque esta obra apareció en Balcaide casi como el obelisco de la película 2001 Una odisea en el espacio, su historia nada tiene que ver con los desbarres de Kubrick, pero sí con los desmanes, incluso desmadres, de la Sociedade Anónima de Xestión do Plan Xacobeo, que el año pasado encargó distintas obras de arte para colocarlas al lo largo del Camino portugués para reforzar el valor histórico y cultural de este itinerario.

Semejante regalo, cuyo valor artístico no está exento de controversia, llegó al Concello de Teo sin previo aviso y sin posibilidad de devolución, por lo que, como a las repujadas sillas heredadas de Armando Blanco, decidieron darle una ubicación provisional a la espera de buscarle mejor acomodo. Pero a diferencia de las 21 poltronas de madera maciza, escudo tallado y terciopelo granate, este obsequio les llegó de la rama más cercana del bipartito.

Bien sea porque el traslado no es cosa baladí -para el emplazamiento actual fue necesario utilizar una grúa de grandes dimensiones- o porque alguna de las ubicaciones estudiadas inicialmente por el Concello necesitaría el permiso de Patrimonio (algo bastante improbable), lo cierto es que en Teo siguen sin tener nada claro cuál puede ser su destino definitivo, ya que debe ocupar terreno público y un emplazamiento que siempre deberá estar vinculado al Camino portugués.

Eso sí, el Ayuntamiento se ha apresurado a reconocer su «predisposición a ver co autor outras posibles ubicacións ou facer pequenas actuacións de mellora no entorno a medio prazo, no caso de que a escultura non se movera». Lo que quieren dejar claro en el consistorio teense es que este asunto «non pode xerar prexuízos nin económicos nin doutra índole a unha administración local, sempre máis limitada en recursos».