Niños de Galicia, Euskadi y Aragón conviven de acampada en Melide

SANTIAGO

09 jul 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

LLevan diez días disfrutando de la tranquilidad del campo y de atractivas actividades que difícilmente podrían practicar entre torres de cemento. Para la gran mayoría, seguro, son sus primeras vacaciones sin papá y mamá. Son niños y niñas de ciudad, tienen entre 12 y 14 años y el próximo viernes recogerán sus bártulos para regresar a casa con una aventura más que contar. Así es el perfil de los sesenta chavales que este año abrieron las puertas del campamento de la Consellería de Familia en la parroquia melidense de Furelos. Veinte vascos, veinticinco aragoneses y quince gallegos forman el grupo, que convive de acampada en un enclave privilegidado: en una arboleda a las orillas del río Furelos y a un paso del Camino Francés. La ruta jacobea constituye uno de los itinerarios que los escolares realizan en bicicleta, que, junto con el tiro al arco y montar a caballo, es una de las actividades en las que ocupan sus intensas jornadas de mañana. Al cargo de catorce monitores también pasan unos días de vacaciones de lo más constructivo participando en talleres de nutrición, educación medioambiental o de habilidades comunicativas. Camino Francés Como bien aprovechadas las horas del día dan para mucho, a los chavales, que se mantienen en pie desde las ocho y media de la mañana hasta las doce de la noche, también les sobra tiempo para ir a darse un chapuzón a las piscinas del área recreativa de Furelos, un buen lugar para conocer a más gente y entablar nuevas relaciones, pues es la principal zona de recreo de los melidenses durante la época estival. En los días que les quedan por delante, los niños tienen pendiente un viaje a Santiago de Compostela y el recorrido del tramo del Camino Francés que discurre desde Melide hasta Ribadiso, en el vecino municipio de Arzúa. Hasta el próximo 15 de agosto, el campamento de Furelos, que funciona desde 1993, recibirá a otros dos grupos de sesenta chavales cada uno. En esta ocasión, serán ya todos gallegos y un poquito más mayores, de entre 15 y 17 años.