Un circo con animales elude el veto de Sanxenxo al estar en una finca privada

El Concello de Sanxenxo manifestó ayer que no puede prohibir el supuesto uso de animales en un espectáculo circense en Portonovo porque el circo se ubica en una parcela privada. Esto dificulta el veto que exigió la asociación animalista Libera. Este colectivo instó al gobierno local a aplicar un acuerdo plenario del 2014 que rechazaba este tipo de espectáculos con seres vivos y el ejecutivo replicó que en estas circunstancias no tiene competencias. El Concello sí que ha actuado cuando ha tenido oportunidad. En los pasados carnavales prohibió la utilización de animales en los desfiles de disfraces.

Sobre el caso del circo denunciado por Libera y que ya protagonizó otra polémica social por su uso de animales durante su estancia en A Estrada, Sanxenxo precisó que poco podía hacer. El gobierno local precisó que mantiene el acuerdo del pleno del 2014 y que, en este sentido, se ha pactado con los dueños de circos en los últimos meses la exclusión de animales en los espectáculos.

No obstante, en el caso de Portonovo, el Ayuntamiento quiso dejar claro que sí podría impedir la actividad en caso de que la carpa se instalase en una parcela municipal. Sin embargo, «al ubicarse en un suelo privado, apto para el mencionado uso, el Concello debe limitarse a la tramitación de la pertinente licencia, que se gestionará requiriendo todos los permisos sectoriales e informes contemplados en el PXOM». El tripartito añadió que la regulación del uso de animales en circos es de la Xunta, a la que el ejecutivo local recurrirá «en caso de que la gerencia de la empresa circense no acceda a contemplar las exigencias municipales».

Por su parte, Libera advirtió que se opone a la supuesta exhibición de una colección de reptiles, entre ellos cocodrilos de gran tamaño y que este colectivo animalista entiende que la empresa circense tiene la intención de exponer en Portonovo.

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