La cotización del pescado en la ría de Pontevedra fulminó este verano su precio prepandemia

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

BUEU

Pulpo fresco en la lonja de Bueu, unas de las destacadas en Galicia por la venta del cefalópodo
Pulpo fresco en la lonja de Bueu, unas de las destacadas en Galicia por la venta del cefalópodo ADRIAN BAULDE

El valor medio en lonja duplicó las cifras del 2019 en Bueu y subió 4 euros en Campelo

22 sep 2021 . Actualizado a las 04:45 h.

El pescado fue caro este verano en las lonjas de la ría de Pontevedra. Al menos bastante más caro que el año pasado y todavía más si se toma como referencia la temporada estival del 2019, la última antes del covid. Esta circunstancia se trasladó también a los mercados, donde los consumidores notaron un incremento de algunas especies, que en algunos casos llegó a ser desorbitado. Atendiendo a los datos de Pesca de Galicia para los meses de junio a agosto de este año, el precio del pescado en lonja se duplicó en Bueu y Portonovo, mientras que el marisco, fundamentalmente la almeja, estuvo a algo más de cuatro euros más cara en las rulas.

Si se tiene en cuenta que este valor se tiene que incrementar en varios euros para que en las plazas y los mercados las pescantinas saquen beneficio, se puede afirmar sin duda de que la mayor parte de las especies en las bancadas estaban más altas que en un verano normal. Pasó en casi todas las cuatro rulas principales de la ría: Campelo, Bueu, Marín y Portonovo, enumeradas en orden de importancia por valor en primera venta. Marín fue la excepción, al quedarse a cinco céntimos por debajo de la media alcanzada en el 2019.

El dato más llamativo se encuentra en una cotización sin precedentes y que difícilmente se volverá a repetir tuvo lugar el 12 de agosto en la lonja de Campelo. El bivalvo alcanzó un valor máximo de 85,50 euros el kilo. Ni en Navidad va tan alta. La razón está en la escasez y la buena calidad del producto que esa semana se puso sobre el parqué poiense.

Los datos rula a rula

Al analizar las cifras de la lonja de Bueu, convertida en la referencia para la venta de pescado y también de pulpo -que estuvo en veda hasta el 5 de julio-, los resultados son muy positivos en cuanto a las cotizaciones para la flota. El precio medio de los productos subastados en Bueu estuvo en 6,67 euros el kilo para los tres meses de junio a agosto. En ese mismo período en el 2020, el valor medio estuvo en 3,64. Hay que tener en cuenta que en el verano del 2020 la restauración estaba saliendo del letargo económico causado por la pandemia y que forzó al cierre del canal Horeca durante meses.

Aún así y en comparación el verano del 2021 los precios fueron muy superiores a los del último período estival de antes de la pandemia. En el 2019 el valor medio de las ventas buenenses estuvo en 3,82 euros el kilo. Este año la tabla de ventas superó también con crecer al 2018, que ya había sido un año caso y donde la lonja había registrado 4,21 euros el kilo. En cuanto a la mercancía, de junio a agosto del 2021 la lonja de Bueu facturó 687.167 euros, frente a los 403.239 del 2020 y los 673.665 del 2019.

En Portonovo, el valor del pescado fue bastante inferior al ofertado en Bueu y se corresponde también con la pérdida de peso que la rula portonovesa ha constatado en los últimos años. Esta lonja hizo 421.645 euros este verano, a una media de 2,80 euros el kilo. En el 2019, el valor medio fue de 71 céntimos.

La lonja de Marín capea mal las ventas desde la marcha del Gran Sol a la rula de O Berbés. Aún así, Marín hizo caja por 469.248 euros, a una media de 3,21 euros el kilo. Es una cotización que se quedó un poco por debajo de la que se registraba en tiempos anteriores al covid.

Campelo mantuvo un liderazgo indiscutible en rentabilidad económica este verano. Las mariscadoras estuvieron en racha, porque con 96.659 kilos de almeja a la venta, lograron recabar casi 1,6 millones de euros. El valor medio del molusco estuvo a 16,19 euros el kilo, frente a los 11,59 del 2020 y del 2019 y muy por encima del verano del 2017 donde estaba a 8,66. La elevada demanda de almeja en los mercados y la escasez de la oferta en Galicia explican este aumento.

El pulpo y los pescados más finos se alzaron a lo más alto de la tabla

La campaña del pulpo empezó en la ría de Pontevedra la primera semana de julio y los resultados, tanto en capturas como en precios, fueron satisfactorios para la cofradía de pescadores de Bueu. La buena marcha de este arranque de temporada la constató la conselleira do Mar, Rosa Quintana, en una visita a la lonja buenense a mediados de agosto. En esta rula los ingresos por el cefalópodo se incrementaron en un 30 %.

Por su parte, en el ámbito de los pescados, las especies más finas escalaron cotizaciones que las pescantinas mismas calificaban de «precios de oro» en las lonjas de las Rías Baixas. Rodaballo, coruxo, lubina y palometa roja, por decir algunas especies, subieron a valores fuera de lo normal. En los mercados de la comarca, los compradores buscaron alternativas y las placeras señalaban que esta circunstancia disparó la demanda del pescado azul, subiendo en todas las especies menos en la sardina.