Final de liga con fiesta para un Cisne que despide a tres de sus jugadores históricos

El resultado era importante. Y se ganó. Se alejó de la plaza de play out y jugará un año más en Plata. Pero la tarde de este sábado era mucho más que jugar un partido que cierra una temporada de altibajos. El Cisne despedía a tres de los suyos, tres jugadores de los que hacen equipo y que se llevan en su memoria dos ascensos a Asobal y una «familia» deportiva. El último minuto del partido fue para ellos. El balón se puso en el suelo y se dejó de jugar. La imagen de todas esas alegrías de años se le pasaron por la cabeza a Bruno Vázquez, Mateo Arias y Javier Vázquez. Con la grada puesta en pie, el cronómetro veía pasar los segundos hasta el pitido final con el único sonido de los aplausos de sus compañeros y de los jugadores del Lanzarote. Una imagen más para esa paleta de recuerdos a la que los tres jugadores hicieron alusión estos días.

El capitán, Javier Vázquez, deja el balonmano. 25 años defendiendo la camiseta blanca en las buenas y en las malas tuvieron este sábado su fin de fiesta en el pabellón que lo vio crecer. No faltó el manteo de sus compañeros, ni las lágrimas que sabía que iba a derramar. Pero también hubo sonrisas y muchas risas. Algunas de los nervios acumulados durante estos días. Hubo manteo también para Bruno Vázquez, el último en anunciar que dejaría el club esta temporada. Lleva siete en el Cisne, a donde llegó procedente del Octavio y ahora comienza una nueva etapa. «Las despedidas nunca son fáciles, pero me voy orgulloso de lo vivido, me llevo grandes amigos. Venir al Cisne fue una de las mejores decisiones de mi vida», decía Vázquez. También era la tarde de Mateo Arias. Comenzó siendo un crío y ayer jugó el último partido con su equipo después de 19 años vistiendo la camiseta granate. Se va para el Villa de Aranda y lo hace con cinco goles en su despedida. El partido era para ellos, para los tres históricos de un Cisne que esta temporada peleó la permanencia hasta el último minuto. Fue un año duro, de muchos cambios. Quiños asumió el reto de sustituir a Jabato y comandar una plantilla muy joven.

La victoria frente al Lanzarote les dio la calma que necesitaban y permitió que la despedida fuese una fiesta con muchos motivos para celebrar. Además del tradicional manteo a Bruno, Javier y Mateo, no faltó la foto de equipo con críos de la base y la vuelta al ruedo de los jugadores que se despedían. Lo único que se echó en falta en el Pabellón Municipal fue al presidente, Santi Picallo. No pudo estar en el encuentro por motivos de salud, pero la plantilla no se olvidó de quien puso los cimientos de un equipo, que como recordó Javier Vázquez, ha ido creciendo desde abajo de todo. Ahora toca reconstruirse en Plata.

FICHA

Cisne: Roney Franzini, Abián Rodríguez, Bruno Vázquez (1), Xoán Fernández, Manuel Lorenzo (2), Iago Costal (3), Víctor Fernández (1), Javier Vázquez (7), Iván Calvo, Diego López (1), André de Moura (3), Daniel Virulegio (1), Mateo Arias (5), Gualther Furtado (1), Carlos Morales (1), Alberto Delgado (1).

Lanzarote:Javier Santana, Javier de la Cruz, Manuel Barrios (1), Mauro Jaureguiberry (3), Rafael Robayna (2), Joel Armas (3), Acoidan Martín (3), Abián Martín (2), Javier Aragón (1), Daniel Csanyi (1), Óscar Silva y Carlos González (3).

MARCADOR: 2-0, 4-2, 6-4, 10-5, 11-8, 12-8 (descanso), 13-9, 16-10, 20-11, 22-13, 25-15, 27-19 (final)

ÁRBITRO: Mikel Gayoso Jiménez y Eder Gómez Eguiluz. Amonestación a Iván Calvo, del Cisne, y a Carlos González, del Lanzarote.

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