Estudian en Pontevedra los efectos del ejercicio intenso en el deterioro cognitivo de pacientes con párkinson

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Karina Pitombeira, Irimia Mollinedo e Iris Machado, el pasado noviembre, durante el estudio piloto previo a la investigación actual
Karina Pitombeira, Irimia Mollinedo e Iris Machado, el pasado noviembre, durante el estudio piloto previo a la investigación actual Ramón Leiro

Casi cincuenta personas participan en la investigación que realizan fisioterapeutas del campus universitario

26 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

A finales del pasado año se llevó a cabo un estudio piloto que dio paso a la investigación que está en marcha en el campus de Pontevedra. Fisioterapeutas del grupo HealthyFit, de la Facultade de Ciencias da Educación e do Deporte, valoran los efectos del ejercicio de alta intensidad en el deterioro cognitivo de personas con párkinson. Con la colaboración de la Asociación de Párkinson de la Provincia de Pontevedra (Apropark) y del servicio de neurología del Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (CHOP), casi 50 pacientes participan en este estudio. El trabajo se enmarca en la investigación que Karina Pitombeira desarrolla para su tesis de doctoramiento y en la que, además de Iris Machado e Irimia Mollinedo, toma parte también el coordinador del grupo HealthyFit, José María Cancela.

Según informó la Universidade de Vigo, varias investigaciones han constatado las mejoras que el ejercicio físico puede generar en la sintomatología que padecen las personas con párkinson. Sin embargo, pocos estudios abordaron hasta la fecha los efectos que podría tener en estos pacientes un programa de ejercicio de alta intensidad como el del trabajo de Karina Pitombeira. ¿Cómo se realiza? Se hace mediante el uso de un cicloergómetro inteligente MotoMed, que permite llevar a cabo de una forma segura sesiones de ejercicio con una cadencia más alta de la que normalmente podrían manejar estas personas. Las investigadoras de Fisioterapia buscan conocer los efectos sobre la sintomatología, el deterioro cognitivo y la condición física de un programa de ejercicio forzado en combinación con actividades de estimulación cognitiva.

«No caso dos pacientes con párkinson é moi importante, a nivel neuromuscular, o estímulo que implica o traballo a altas revolucións», señala Pitombeira, que explica que el uso del MotoMed les permite trabajar con una intensidad de 90 revoluciones por minuto, con independencia de que los pacientes puedan seguir esa cadencia, que la propia máquina mantiene, de tal forma que continúan ejercitándose de una forma activa-asistida. Las personas con párkinson presentan altas dificultades para realizar tareas complejas o con varios focos atencionales y, más concretamente, pueden presentar dificultades para realizar tareas duales, como por ejemplo, combinar una actividad física con otra de carácter cognitivo, que es precisamente lo que propone este estudio. El trabajo evaluará a un mínimo de 44 pacientes. Tras la primera fase, en septiembre se iniciará la segunda con el estudio clínico longitudinal, un programa de ejercicio de doce semanas.