Un robot de cocina, nuevo cebo en Pontevedra para una estafa a través de internet

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

La Audiencia Provincial dicta nuevos fallos centrados en timos tecnológicos

27 abr 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La creciente problemática con las estafas a través de internet constatada por la Guardia Civil y la Policía Nacional de Pontevedra en los últimos años tiene su reflejo, como no podía ser de otra forma, en los tribunales. De este modo, es hasta cierto punto habitual que periódicamente los juzgados reciban causas vinculadas con estos timos, procedimientos que, en muchos casos, terminan recayendo en la Audiencia.

De hecho, recientemente, los magistrados de este órgano judicial han confirmado dos fallos previos que tienen en común la tipología delictiva: la estafa.

Es el caso de un pontevedrés que acaba de ser condenado a nueve meses de prisión y al pago de una indemnización de algo más de 767 euros. Se considera acreditado que empleó como anzuelo uno de los más reconocidos robots de cocina que ofreció, en el verano del 2020, a un precio muy rebajado en una portal web de compraventa de segunda mano. Y lo hizo «con la intención de obtener un beneficio económico ilícito» y sin que, «en realidad tuviera intención alguna de vender dicho objeto y con el solo objeto de cobrar el precio», reseña el fallo confirmado por la Audiencia de Pontevedra.

De este modo, el 27 de agosto de hace dos años, el acusado y la víctima llegaron a un acuerdo económico por teléfono, de tal modo que está última ingresaría 767,50 euros en la cuenta de la que el acusado era titular, asegurándole que recibiría el robot en fechas próximas. Sin embargo, tras hacer el ingreso pactado, el ahora condenado «nunca le envió la máquina ni le devolvió el dinero».

La coartada que esgrimió vía recurso, ya que en el juicio se acogió a su derecho a no declarar, fue que le facilitó su número de cuenta a un compañero de piso, que sospecha que está en la cárcel de Las Palmas de Gran Canaria, para cobrar un importe de unos trabajos sin darle más explicaciones. «El ofreceu a venda [do robot], el recibiu os cartos que por ela solicitaba na súa conta bancaria e, insistimos, nin entregou a máquina nin lle devolveu os cartos que por ela pagou á persoa interesada en recibila. Así de sinxelo», respondió la Audiencia de forma contundente.

Más pena de prisión, un año de cárcel, recayó sobre una segunda timadora que engañó, en su caso, a un compañía de telecomunicaciones. Para ello, la acusada, en fechas anteriores al 21 de diciembre del 2018, empleó los datos de otra mujer, incluido su DNI, y sin que se conozca el modo en que los consiguió, solicitó de la compañía telefónica el alta en una línea telefónica, a la vez que logró que le remitieran a su domicilio un Iphone XS Space Grey valorado en 1.224 euros, cantidad que ahora se consigna como indemnización.

La sentencia establece que la acusada, sin intención de abonarlo, recogió el smartphone personalmente de manos del empleado de la empresa de paquetería, tal y como manifestó durante la vista oral este trabajador, quien «reconoció sin duda a la acusada como la persona a la que hizo entrega del paquete». Por su parte, la entidad remitió el teléfono móvil en la creencia de que quien recibía el terminal era la persona a la que la condenada suplantó su identidad.

La sentencia, por otro lado, recoge que esta misma «operación se repitió con otros cinco terminales móviles, dos Huawei, un Samsung, un Sony y otro sin especificar, pero no consta acreditado que la receptora final de los mismos hubiera sido la acusada».