La lectura de las entrañas de la Casa Consistorial desvela detalles del pasado del edificio

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Catas interiores en el histórico edificio diseñado por Sesmero analizan el semisótano antes de la reforma prevista en la primera planta

08 sep 2021 . Actualizado a las 09:00 h.

Los adivinos romanos leían las entrañas de los animales para predecir el futuro. En la actualidad, las catas arqueológicas son algo así como leer en las entrañas del suelo, o de edificios, pero para desvelar el pasado. Es lo que se está haciendo estos días en la Casa Consistorial de la plaza de España, donde como fase previa al proyecto de reforma que se acometerá en los próximos meses se está sometiendo a análisis el semisótano.

En este caso las catas no son en el subsuelo sino en las paredes interiores, y están desvelando aspectos no del todo conocidos de la historia del edificio, diseñado por Alejandro Sesmero e inaugurado en 1880.

Ese semisótano fue en realidad añadido en 1944, cuando se llevó a cabo una reforma que transformó el inmueble. Además de esa planta inferior, en dicha reforma se construyó la «escalera imperial» que llegó hasta nuestros días, se elevó ligeramente el nivel del suelo en la planta baja y se hicieron añadidos de dudoso gusto con respecto al proyecto de Sesmero.

Por 400.000 pesetas en 1944

Esa obra se ejecutó, explicó el arquitecto municipal, Ángel Velando, para preparar una visita de Francisco Franco y costó 400.000 pesetas. Comparando el presupuesto municipal de 1994 y el actual, el equivalente a aquella inversión hoy en día serían unos 6,7 millones de euros. La reforma que se proyecta ahora, y que afectará a la planta primera y a la accesibilidad del inmueble, asciende a unos 700.000 euros.

Volviendo al semisótano, las catas que se llevan a cabo son verticales, en los muros interiores, y están poniendo de manifiesto puertas y pasajes diseñados originalmente por Sesmero y que fueron tapiados con ladrillos en aquella reforma de 1944. Otro de los aspectos que han llamado la atención de arquitectos y arqueólogos es que parece que la cimentación del inmueble sigue siendo la misma no ya del proyecto de Sesmero, sino de las llamadas «casas el Concello», que ocupaban ese solar con anterioridad. Y es que el lugar donde se erige la Casa Consistorial, con fachada a Alhóndiga y plaza de España, está edificado desde el siglo XV. Originalmente acogió el torreón de Bastida Grande, apoyado sobre la muralla de la ciudad.

El arqueólogo municipal, Xoán Carlos Castro, explicó que esta fase de los trabajos se están «recopilando datos» que permiten, ante la ausencia de planos originales, «coñecer a pegada histórica da evolución do edificio».

De momento, el semisótano quedará fuera de la reforma prevista, que será una primera fase y afectará a la planta superior. Allí se habilitará un nuevo salón de plenos y un espacio de recepciones institucionales. Esta planta será accesible mediante la instalación de un ascensor.

El gobierno local espera disponer en breve del proyecto de ejecución e iniciar el proceso de contratación. El objetivo es que haya obras este año -el presupuesto incluye ya una dotación de 300.000 euros-, y que esta primera fase se pueda rematar a lo largo del 2022.