El Concello acometerá en el 2021 la restauración de la casa consistorial
PONTEVEDRA CIUDAD
Se han pedido propuestas a cinco de arquitectos para la rehabilitación del edificio
25 feb 2021 . Actualizado a las 19:32 h.El viejo edificio de Alejandro Sesmero en la plaza de España, que durante más de cien años acogió la sede principal del Ayuntamiento de Pontevedra, afrontará en el 2021 la que ha de ser la fase decisiva de su rehabilitación. El gobierno local ha encargado a cinco equipos de arquitectura la presentación de propuestas para recuperar para uso público la primera planta del inmueble y para aportar soluciones que garanticen la plena accesibilidad al mismo. Se espera que esas propuestas, que tienen que cumplir un serie de requisitos plasmados en un «programa de necesidades», estén listas en enero, y un jurado elegirá la que se convertirá en anteproyecto.
La portavoz del gobierno local, Anabel Gulías (BNG), recordó que se trata de acometer la segunda fase de la rehabilitación del inmueble. Hace ya siete años, en el 2013, se llevó a cabo una primera parte del trabajo consistente en la revisión de la estructura del edificio, inaugurado en 1880, y en la renovación la carpintería exterior y de la cubierta, así como un completo tratamiento anticarcoma. Además, en aquella época se reformó la planta baja para albergar las oficinas de los servicios técnicos municipales.
La restauración de la planta superior se dejó para más adelante, y hasta ahora nunca llegó a los primeros puestos de las prioridades municipales. Siempre hubo otros proyectos que acometer, y esa parte del edificio fue deteriorándose a ojos vista, hasta el punto de que se llegó a recomendar no acceder a la misma por el riesgo que podría acarrear. La situación fue denunciada en su día por el grupo municipal del PP, que exigió al gobierno local la rehabilitación completa del edificio.
«Sempre estivo nos nosos pensamentos -insistió ayer Gulías-, e agora chegou o momento de facelo». El trabajo comenzó hace meses con la elaboración de ese «programa de necesidades», en el que se definen los usos que se quiere dar a la planta primera, que tendrá un claro carácter institucional.
Lo fundamental que tendrán que aportar los arquitectos es una solución para garantizar la plena accesibilidad. Si hace ya veinte años los plenos se trasladaron de este edificio al Teatro Principal fue porque el edificio de Sesmero presenta grandes carencias en este sentido. Por lo tanto, integrar un ascensor en la futura reforma es una de las tareas encomendadas a los equipos de arquitectos. «É imprescindible garantir a conexión vertical de todo o edificio», apuntó Anabel Gulías.
Dos entradas
También se prevé habilitar dos entradas. La principal, por la plaza de España, será para «usos institucionais e protocolarios»; mientras que la trasera, por la Rúa Alhóndiga, será «entrada funcional dos traballadores e de cidadáns que acudan a realizar trámites ás oficinas» de la planta baja.
La rehabilitación de la planta superior será el eje principal de la reforma, y se pretende darle dos usos principales. Por un lado, devolver el salón de pleno al inmueble, pero «adaptado ao século XXI, e con capacidade para dar cabida ao maior número de persoas posible». El salón ocupará toda la fachada que da a la plaza de España y será un espacio «versátil», que también permita la celebración de eventos como bodas o ceremonias de bebés. Anexa al salón de plenos se prevé una sala de comisiones con capacidad para quince personas respetando las distancias que marcan las medidas anticovid.
El segundo uso será institucional: la fachada posterior acogerá un espacio para recepciones, con un despacho protocolario para el alcalde -que mantendrá su lugar de trabajo diario en Michelena, 30-, un área para el servicio de protocolo y espacios de almacén y aseos.
El semisótano se destinará en el futuro a usos socioculturales
Los equipos de arquitectos que han sido invitados por el Concello de presentar sus propuestas para la rehabilitación de la casa consistorial son Mauro Lomba, Garitaonaindía, RVR Arquitectos, Uña y Amandi Arquitectos y Rodríguez Pintos, todos ellos con experiencia en la restauración de inmuebles históricos.
Además de planificar la pretendida conexión vertical del edificio y de diseñar la rehabilitación de la planta superior y de los accesos, los arquitectos tendrán que prever en sus propuestas el uso futuro del semisótano, actualmente ocupado por una parte del archivo municipal. La idea es trasladar algún día esas dependencias a otra ubicación y destinar ese espacio a usos socioculturales, como un centro social más integrado en el entramado urbano.
La incorporación de remanentes en abril dotará de fondos al proyecto
El gobierno local de Pontevedra, apuntó Anabel Gulías, quiere acometer esta segunda fase de la rehabilitación de la casa consistorial «o antes posible». Pese a ello, no hay partidas específicas incluidas en el borrador de presupuesto municipal para el 2021 que se está tramitando estos días. Previsiblemente se esperará a la incorporación de remanentes, que aportará en torno a 20 millones de euros a las cuentas municipales, para habilitar una partida destinada a la casa consistorial. De momento, hasta que se cuente con un anteproyecto, no se quieren aventurar cifras ni plazos obras.