Los marinenses no se rindieron, pero la efectividad de los locales fue evidente
06 abr 2019 . Actualizado a las 21:33 h.Texto
Inauguró el marcador Sevillano. Un estreno que se hizo rogar más de la cuenta al no estar demasiado inspirados en los lanzamientos ninguna de las dos escuadras en el inicio. Parecían moverse mejor los de Llorente, que encontraban huecos en las internadas al aro y conseguían aguantar las embestidas en ataque del Villarobledo.
Los locales, muy presionados, se vieron obligados a trabajar desde la línea de tres, demostrando talento en esta tarea y consiguieron rápidamente pillar a un Peixe que había conseguido una ventaja de cinco puntos sobre ellos. Confiados los baloncestistas de rojo, continuaron con su racha triplista gracias a Martin Smith. El Peixe necesitaba calma y Llorente pidió tiempo muerto.
Durante un buen tramo, los marinenses consiguieron dominar a los anfitriones, pero estos consiguieron llevar el partido a su terreno y poco a poco minaron la capacidad de sus rivales. Al descanso, la efectividad superior del equipo anfritrión era vidente. Habían logrado sumar hasta diez puntos más.
El Peixe, con capacidad de supervivencia demostrada comenzó a trabajar en la posibilidad de recortar distancias, pero la férrea defensa del Villarrobledo resultó muy dolorosa. Tanto como la mala puntería que durante un buen rato exhibieron los marinenses. Por su banda, Martin Smith no paraba de arponear a los visitantes
El partido empezaba a írsele de mala manera a Llorente. Las cosas no salían y la suerte tampoco ayudaba en exceso. No siempre se tiene el día. Para los de Albacete, todo lo contrario: habían dado justo con la nota de la sinfonía que debían interpretar.
Rozando la diferencia de los veinte puntos, el Villarrobledo se ponía cómodo. Aún tenía cinco minutos por delante y todo un cuarto por delante. Lo sabía también el Peixe, pero simulaba poco tiempo para remar a contracorriente y poder lograr la remontada.
A lo largo del último compás del encuentro, el equipo local se mantuvo sereno y no se dejó llevar por presión alguna. La tónica del partido se mantuvo y los marinenses asumieron que poco podían hacer además de seguir sobre la pista. La diferencia de veinte puntos era inamovible, y, con ella, la victoria del Villarrobledo un hecho.
?Eneogwe (7), Fernández (15), Nesbitt (14), Alaminos, Diene (17), Suskavcevic (1), Lapaz, Valles (5), Martínez (7), Lee (5), Smith (22).
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Badmus (8), Gregory (19), Pablo González, Vashil (7), Antonio Pantín (8), Orellano (8), Romero (8), Sevillano (13).
Parciales: 23-23, 22-12 (45-35, descanso), 32-20 (77-55) y 21-20 (98-75, final).
Árbitros: Carrera Rosdevall, Eric; y Gallego Rodríguez, Carlos.
Incidencias: Partido perteneciente a la décimo séptima jornada de la LEB Plata, disputado en el pabellón municipal del Barrio de los Pintores.