Alta demanda de la FP Básica, que se nutre de quienes fracasan en la ESO

María Hermida
maría hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

En el centro Carlos Oroza tienen el doble de solicitudes que plazas en este ciclo

22 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Con cierta pena, incluso con tristeza, distintos directores de institutos pontevedreses señalan que la demanda en la Formación Profesional Básica es muy alta, que aumenta cada curso. ¿Por qué lo cuentan con pesar? Porque esta FP se nutre de alumnos de entre 15 y 17 años que cursaron la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y fracasaron en su intento de obtener la titulación -si sobran plazas puedan entrar personas adultas que no tengan estudios secundarios-. Coloquialmente, es el último tren para los estudiantes de esas edades. En Pontevedra, se imparten especialidades de ese ciclo básico en el CIFP A Xunqueira, el Carlos Oroza, el Frei Martín Sarmiento, el Luís Seoane y el Montecelo. Aunque la matrícula todavía acaba de cerrarse y falta hacer números, en casi todos detectan que la demanda de plazas en la FP Básica va al alza. Especialmente significativo es el caso del Carlos Oroza, donde el director explicó que tuvieron 45 solicitudes para las veinte plazas que ofertan en la FP Básica de cocina y restauración.

Los alumnos que entran a la FP Básica, que lo hacen después de que sus profesores en la ESO informen favorablemente su paso a esta modalidad y sus padres estén también de acuerdo en ello, tienen por delante dos cursos de alguna modalidad profesional, tal como carpintería, peluquería o cocina con numerosa carga práctica. Y luego también tienen una vertiente académica, tanto de la parte de las lenguas como de las ciencias. Si aprueban la FP Básica tienen derecho a pasar a un ciclo medio de FP y, aunque dependiendo de los institutos varían las cosas, habitualmente también se les concede la titulación de la ESO. ¿Cómo está siendo la experiencia en Pontevedra en esta FP? Hay una palabra que utilizan todos los directores para definir a los jóvenes que van a parar a ese ciclo: «Llegan desmotivados, y son clases complicadas por ese motivo», se escucha decir. Hay quien le busca la parte positiva, como el director del CIFP Xunqueira: «Es cierto que son alumnos especiales, porque vienen de fracasar en la ESO y algunos con distintos problemas. Pero para muchos esta es una alternativa válida, y acaban estudiando luego un ciclo medio, lo cual es muy bueno». Y hay quien cree que, aunque no imposible, es complicado sacar resultados positivos en clases de esas características. «Non resulta sinxelo porque a desmotivación que traen é moi grande» indicaban casi con las mismas palabras desde dos centros pontevedreses distintos.

De toda la provincia

En la FP Básica de los institutos pontevedreses no solo hay alumnos de Pontevedra. Vienen también de O Salnés o incluso de todo el norte de la provincia, ya que se imparten aquí numerosas especialidades. Algunos profesores se quejan de que ese último tren escolar tengan que cogerlo los alumnos a edades tan jóvenes. Creen que debería retrasarse hasta los 17 años.